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OPINION

I

Domingo 5 de septiembre de 2010

Cartas Buenos Aires, domingo 5 de septiembre de 2010

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de lectores

“LA NACION será una tribuna de doctrina”

La carta del domingo

Fundado por Bartolomé Mitre el 4 de enero de 1870

Vandalismo en las escuelas

(Núm. 1, Año 1)

Director: BARTOLOMÉ MITRE

Lecciones del caso Graiver La nueva revisión de nuestro pasado trágico ha comenzado a ventilar aspectos sórdidos del otro terrorismo L recuerdo del caso Graiver ha abierto una especie de revisión de la revisión de los crueles años del terrorismo subversivo y del terrorismo de Estado con el que se le respondió. Sobre este último fenómeno había muchísimos aspectos ventilados, con juicios formales, acusaciones y condenados a prisión en cárceles comunes. Más de cien de ellos han muerto en prisión, algunos sin condena ni respeto por reglas básicas que, desde el siglo XVIII, han regido en el derecho penal, como es la de estar formalmente imputado por algún delito. En aquella condición se encuentran algunos de los varios centenares de militares y miembros de cuerpos de seguridad detenidos por presuntos crímenes de lesa humanidad. Pero con el caso Graiver se han comenzado a ventilar una vez más aspectos sórdidos del otro terrorismo, el que carga sobre sus espaldas con unos mil asesinatos y ninguna condena porque los responsables han sido amnistiados no una, sino dos veces. Todo eso era de sobra conocido, salvo algunos datos que salen a la luz y conspiran contra la solidez de la historia oficial amañada en estos años. La avalancha de imputaciones contra los crímenes que se cometieron desde el Estado había oscurecido lo obrado por la contraparte. Se había logrado neutralizar en la memoria colectiva, a partir de una propaganda intensa, repetitiva y sistemática, los procedimientos por igual brutales y simétricos empleados por bandas que, en la dispersión, buscaron antes refugio en países democráticos que en los autoritarios de la extrema izquierda. Ninguna “juventud maravillosa” pudo haber cometido, como efectivamente ocurrió, unos veinte mil hechos de violencia en la década bárbara que padeció la Argentina. Ahora han salido a la luz, en una de esas jugarretas impensables del destino, aspectos penosos de falsos héroes en el tráfico de influencias e imposturas: actitudes de pícaro travestismo político, extorsiones y defraudaciones cruzadas, invención de identidades y generación de cuantas bajezas pudieran florecer en la tierra humedecida por sangre de inocentes y de quienes se entregaron a la lucha en nombre de diferentes banderas. A raíz del caso de quien más acá en el tiempo y en otro escenario habría sido un espectro parecido al de un financista al servicio de ETA en España, se proyectan desnudas las imágenes de quienes pretendían abrigarse con ropajes impropios, aunque de elaborada

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sastrería teatral, para el papel de verdad asumido en el pasado. Mucho antes se habían desintegrado grupos ciudadanos de la valía como el que significaron en los años de plomo las Madres de Plaza de Mayo, que han merecido nuestra consideración por la lucha en aquel tiempo. Además de su escisión temprana, nos referimos a los compromisos de carácter no sólo político de uno de esos alineamientos con el Gobierno. Del otro lado, libre de tales datos contrastantes, han quedado las Madres de la Línea Fundadora. Bien ha dicho Victor Hugo, en Noventa y tres, novela histórica sobre el gran año del terror en la Revolución Francesa, que a las bellaquerías les gusta ser presididas por una virtud. El caso Graiver no es más que un síntoma de la descomposición perceptible en franjas de peso en la política nacional. Eso trasciende, por su importancia, al ciclo eventual de los Kirchner en el Gobierno. Los días que corren han sido testigos de farsas trágicas, pero también de conductas que han compensado con creces, a veces por lo inesperadas, otras por lo autorizadas, el desánimo que podría haber cundido en una parte de la ciudadanía. Sin ellas, hubiera sido un exceso difícil de soportar el cuadro de un país sometido a tamaña sucesión de prácticas políticas que agobian y no siempre encuentran remedio en la Justicia. El caso Graiver ha abierto, a pesar de todo, el proceso de revisión de la revisión del pasado tumultuoso de hace 34 años. Ha puesto al descubierto el caudal de hipocresía con el se concibió una historia acomodaticia para la facción que quiso, por aquellos años, apoderarse del poder a los tiros, con bombas, secuestros y extorsiones de magnitud desconocida hasta entonces. Con haber logrado eso, el caso Graiver habrá hecho bastante. No es necesario llegar, como respuesta de la ecuanimidad que alguna vez deberá consagrarse, a la condena de los protagonistas de tales delirios del terrorismo de los años setenta. No sería lo mejor para la pacificación nacional. Lo fundamental será preservar siempre un trato equivalente para quienes, de uno y otro lado, hirieron con su violencia fuera de la ley a la República y dejaron una huella grave e inolvidable. Al conocer los alcances de aquella dolorosa experiencia, los argentinos entenderán mejor que antes que no puede haber, en una sociedad pacífica que se respete y aspire a vivir con libertad, espacio alguno para quienes lucran con los principios más elevados de un Estado de Derecho y con el sacrificio y la sangre de sus muertos. Los especialistas en derecho constitucional y derecho penal internacional deberán aprovechar las crudas lecciones de todo esto y los hombres de Estado tomar nota de sus reflexiones.

Señor Director: “Los alumnos de varios colegios secundarios están protestando por el estado edilicio de las escuelas, incluso cortan las calles. No sería mala idea que se averiguara si el deterioro de las escuelas es el normal por el uso y la falta de mantenimiento, o está incrementado por manos destructivas. Lo digo por experiencia personal. “Doy clase en un instituto terciario de la ciudad de Mendoza, que funciona en horario vespertino en una escuela secundaria. Es vergonzoso el estado en que los alumnos dejan el edificio. La Dirección de Escuelas pintó todas las paredes a comienzos del año pasado y en este momento todas las aulas están pintarrajeadas, escritas y sucias, llenas de grafitis y manchas. Los pupitres y las sillas rayados y con la fórmica descascarada. Todos los años debe ser arreglada una gran cantidad de estos muebles por el maltrato que reciben y porque los alumnos se entretienen marcándolos con biromes o un punzón o

Lista sábana

Señor Director: “Cuando a los gobiernos de turno les conviene la sanción de una ley determinada, no reparan en esfuerzos para sancionarla. “Casi toda la clase política manifiesta estar de acuerdo en eliminar la elección de candidatos por el sistema de lista cerrada o sábana; pero nunca modifican la ley electoral. Sería muy bueno para nuestra salud democrática, en las próximas elecciones de 2011, que se pueda tachar en las listas a aquellos candidatos por incapaces o corruptos, o por haber defraudado a sus anteriores votantes. “Para esto, es necesario evitar que se camuflen en una lista sábana. Así se podrá elegir, sin optar por el menos malo.”

Miguel Pombo DNI 14.486.264

Robo de ganado

Señor Director: “Hace más de dos años que sufrimos robos en distintos establecimientos agropecuarios de San Vicente. Estamos cansados de que nos roben vacas, terneros, caballos, cables eléctricos, herramientas, emprendados, jaulines, etcétera. Estamos cansados de que nadie planifique una política de seguridad y que se cumpla con todo el rigor de la ley. “¿Cómo es posible que se roben de a 50 animales y cómo es posible que en un mes se hayan robado unas 150 cabezas? Hace pocos días desaparecieron 7 terneros... “Las autoridades no nos dan respuestas concretas. No es suficiente con hacer actos para presentar un nuevo comisario. Reuniones muchas; resultado, ninguno.”

Roberto A. Lusardi DNI 12.557.274

Reírse y pensar

Sarampión: una campaña necesaria Ante los primeros casos detectados en la provincia de Buenos Aires, las autoridades sanitarias reaccionaron con eficiencia ADIE esperaba que el sarampión volviera a aparecer en la Argentina hasta el punto de que se considerara necesario emitir una alerta por la existencia de posibles casos y de poner en práctica rápidamente planes de vacunación. Esta enfermedad, que había sido, mucho tiempo atrás, de las más comunes entre las infantiles, con los años se tornó altamente peligrosa, por lo que la vacunación es obligatoria desde los 6 meses de edad hasta los 50 años, por lo menos. Que las campañas han resultado efectivas lo prueba el hecho de que esta enfermedad se consideraba eliminada de la Argentina desde 2000. Sin embargo, coincidió en el tiempo que en Sudáfrica, sede del reciente Mundial de Fútbol 2010, se produjo una epidemia de esa enfermedad, por lo cual aparecieron en nuestro país casos de sarampión de argentinos que habían viajado a ese país para el encuentro. Es interesante destacar que, debido a que el sarampión hace diez años que no se ve en las consultas médicas, podría ocurrir que pediatras y clínicos no reconocieran inmediatamente los síntomas, de allí la importancia de difundirlos por todos los medios posibles. Fiebre, conjuntivitis, tos (triple catarro) y erupción generalizada con espacios de piel sana son las manifestaciones clínicas más evidentes por las cuales se debe hacer una rápida consulta al médico, ya que esta enfermedad es altamente contagiosa. La existencia de algunos casos se conoció

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en la primera quincena de agosto último y la reacción de las autoridades del Ministerio de Salud, afortunadamente, no se hizo esperar. Hubo una reunión, encabezada por el ministro Juan Manzur, con especialistas de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y referentes locales de infectología para analizar la situación. Como resultado inmediato, se logró la articulación de una política pública desde el orden nacional, provincial y municipal, que devino en la conformación de un comité itinerante que se instaló en la zona donde aparecieron los casos sospechosos, es decir, en la provincia de Buenos Aires. Por esa razón, también, la campaña de vacunación fue dispuesta en esa jurisdicción y en la ciudad de Buenos Aires, en primer lugar, aunque, más tarde, cuando se detectaron casos sospechosos en San Juan y en La Rioja, también se instó a los habitantes de esas provincias a vacunarse. Desde el Ministerio de Salud de la Nación se advirtió a la población que se cuenta con dos millones de vacunas y que la vacunación es gratuita en todo hospital y vacunatorio público nacional, provincial o municipal. Las medidas tomadas oportunamente para enfrentar la gripe A parecen haber servido de perfecto entrenamiento para que ahora tanto las autoridades correspondientes como los medios de comunicación y la población misma hayan reaccionado responsablemente ante la posibilidad de que el sarampión reaparezca en nuestro país. Por supuesto, todavía habrá que mantenerse alertas e informados porque el peligro no ha cedido, pero el panorama se presenta más alentador que con respecto a otras enfermedades, como el mal de Chagas o la leptospirosis.

Señor Director: “Lo bueno debe ser reconocido; lo que nos da felicidad debe ser agradecido. “Levantarse una mañana y encontrar en el diario el humor de Nik y los comentarios literarios de Silvia Hopenhayn es un placer que se reconoce y se agradece. Los dos, cada uno a su manera y con sus herramientas, perforan lo real y logran un efecto de estallido. “Con sus miradas agudas llegan al centro de los hechos y descubren lo inesperado. Gracias a la fuerza de sus frases, son capaces de deslumbrarnos mostrándonos aspectos de la realidad que sorprenden y entusiasman. “Reímos y pensamos, ¿qué mejor que el pensamiento y el humor? Una alegría y un alivio en medio de tanto desagrado.”

Clara Klix Berrotarán DNI 6.363.834

Peatones imprudentes

Señor Director: “Un funcionario del gobierno de la ciudad autónoma de Buenos Aires aclaró ante los medios televisivos que la implementación de la nueva medida orientada a quitar temporalmente el registro de conducir a aquellos automovilistas que crucen un semáforo en rojo tiene como finalidad cuidar tanto

arrancándoles pedazos. “¡Y qué decir de los pizarrones! Los escriben con pintura indeleble limitando considerablemente el espacio para escribir en la clase. “Como los calefactores funcionaban mal, la cooperadora compró unos nuevos. Duraron dos meses y hubo que enrejarlos y colocar una plancha metálica para proteger la llama pues los pateaban y metían biromes adentro para que saliera humo y así perder clases.

a peatones como a conductores. “Independientemente de las loables intenciones de cuidar a los vecinos de la ciudad, me pregunto: a los peatones que cruzan, sin necesidad ni razón, semáforos en rojo, ¿qué les quitan? ¿O será que, otra vez, lo que vale para unos no vale para otros?

Claudia Silvana Queirolo [email protected]

Gracias al Clínicas

Señor Director: “Quisiera dar testimonio de la conducta ejemplar de médicos como el doctor Sebastián Fernández y el equipo de residentes, enfermeros y personal auxiliar del Servicio número 2, doctor Damián Contardo. “En esta ocasión, mi amigo Orlando Bosch, carente de familiares, es atendido en su complejo estado de salud. Además de brindarle asistencia médica, tiene un apoyo humano y solidario del que en ocasiones se supone que falta en nuestro país. “Mi trato permanente, pese a críticas circunstanciales, permite manifestar que mi país, la Argentina, brinda la mejor ayuda no sólo a los nativos, sino a cualquier extranjero necesitado. El Clínicas es una escuela médica digna de los altos juramentos hipocráticos.”

Eduardo Scornavache DNI 4.161.364

Sin quórum

Señor Director: “Otra sesión más de la Cámara de Diputados frustrada por falta de quórum. “Y según reporta LA NACION, causada no sólo por el previsible faltazo del oficialismo y sus aliados, sino también por media docena de diputados de la oposición que no pudieron llegar a tiempo a la sesión por atrasos en sus vuelos ante el mal clima. “¿No saben estos últimos que su presencia en el recinto es vital para lograr quórum? Ante esta situación, ¿es mucho pedirles que estén presentes en Buenos Aires un día antes de cada sesión, como haría cualquiera de nosotros ante un compromiso importante?”

Francisco Agote DNI 20.430.573

Otra forma de protestar

Señor Director: “¿Qué pasaría con nuestra lastimada democracia si cambiáramos algunos métodos de protesta que agreden y perjudican a la mayoría por otros que beneficien a todos sin excepción? Me refiero a la lamentable modalidad de tomar escuelas, cortar calles, rutas y demás alternativas que se deciden de manera unilateral, y no respetan los derechos de la gran mayoría. ¿Será posible que ningún estudiante de los que siempre se anotan en las rebeliones o ningún sindicalista haya podido descubrir otro método que no sea perjudicar al resto de los compatriotas en sus tareas diarias? “Así lo hizo el pueblo japonés en su momento para implementar sus huelgas en donde duplicaban la producción de sus fábricas, generando problemas a la inversa por exceso de

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“En otra ocasión bloquearon un inodoro y dejaron el agua corriendo todo el fin de semana, en un baño de varones del piso alto. El lunes siguiente toda la pared hasta ese momento impecable, de la oficina de alumnos, estaba embebida en agua. “En fin, es lo que vivo en Mendoza en una escuela normal, donde los alumnos no son ni mejores ni peores que en otro lado. Es lo que hoy hacen los chicos y nadie pone un poco de cordura en esto. Si realmente educáramos en responsabilidad, el que rompe debería arreglar y el que ensucia, pintar o limpiar. ¿Qué tal si les ofrecemos a estos secundarios en huelga pintura, brocha y herramientas para que ellos mismos se hagan responsables del lugar en que pasan tantas horas del día? Pienso que si cada uno hiciera el esfuerzo de mejorar su pequeño hábitat, podríamos lograr entre todos un país mejor.”

Cristina Nores [email protected]

stock, etc. ¿No se puede lograr algo similar excediéndose en la cantidad de horas cursadas por los alumnos, o sea, adelantar sus estudios o exámenes y no atrasarlos? ¿Por qué será que algunos argentinos se sienten tan inteligentes a la hora de protestar, haciendo lo que les place, sin analizar las consecuencias que recaen sobre la mayoría que seguramente no opinó ni comparte las metodologías adoptadas? “Como bien lo definió en su momento Albert Einstein, “no se puede buscar resultados distintos haciendo siempre lo mismo”. Entonces, creo que llegó el momento de cambiar. Espero que los responsable de las masivas rebeliones diarias se hagan cargo y analicen cómo mejorar sus reclamos.”

Mauricio Maurette DNI 13.380.744

Unión y libertad

Señor Director: “En las ediciones de los días 31/8, 2/9 y 3/9, LA NACION publicó tres cartas de lectores para proponer la creación de un lema-fuerza para nuestro país, sin advertir que ya lo tenemos desde los albores de nuestra nacionalidad: «En unión y libertad». Fue acuñado en la primera moneda patria, y actualmente figura en las monedas de un peso que usamos diariamente. “Además, está simbolizado en nuestro Escudo Nacional, por las manos entrelazadas en señal de unión, y por el gorro frigio que representa la libertad. Coloquialmente podríamos expresarlo como «tirando todos para adelante, aun discrepando». “Teniendo en cuenta el estado de dispersión de los partidos políticos y el virtual estado de guerra entre los poderes Ejecutivo y Legislativo, sería bueno que este lema se utilizara en las aperturas de las sesiones del Congreso nacional, y se citara en la promulgación de las leyes y decretos nacionales, de manera que nuestros legisladores y funcionarios ejecutivos de todo el espectro político, sin excepción, lo tengan siempre presente al momento de tomar decisiones.”

Norberto Marcos [email protected]

Caperucita Roja

Señor Director: “Hace unos días, un lector reclamaba la devolución de la estatua de Caperucita Roja, realizada en homenaje a Hans Christian Andersen. Esta fue utilizada para una exposición en el Centro Cultural Recoleta y hasta la fecha no ha sido devuelta. “Creo tener la respuesta ante la negativa de Caperucita Roja de retornar a su lugar de origen: teme morir ahogada. En la aledaña Plaza de la República de Chile, a diez metros de la recientemente inaugurada bicisenda, hay un caño averiado que permanentemente inunda ese sector. “Esperamos una pronta reparación a ese caño, que pese a los siguientes reclamos efectuados ante el gobierno de la ciudad de Buenos Aires, aún no hemos tenido suerte.”

Pilar Lassalle DNI 5.248.448 [email protected]

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