PLATÓN “—Entonces queda nuestro asunto así, Simmias? —dijo él—. Si existen las cosas de que siempre hablamos, lo bello y lo bueno y toda la realidad de esa clase, y a ella referimos todos los datos de nuestros sentidos, y hallamos que es una realidad nuestra subsistente de antes,y estas cosas las imaginamos de acuerdo con ella, es necesario que, así como esas cosas existen, también exista nuestra alma antes de que nosotros estemos en vida. Pero si no existen, este razonamiento que hemos dicho sería en vano. ¿Acaso es así, y hay una idéntica necesidad de que existan esas cosas y nuestras almas antes de que nosotros hayamos nacido, y si no existen las unas, tampoco las otras?”

EXPONER LAS IDEAS 1. LA PREEXISTENCIA DEL ALMA unida a la PREEXISTENCIA DE LAS IDEAS, “es necesario que exista nuestra alma antes de que estemos en esta vida”, “hay una idéntica necesidad de que existan esas cosas y nuestras almas antes de que nosotros hayamos nacido” 2. IDEAS, “lo bello y lo bueno y toda la realidad de esa clase”, la auténtica realidad platónica 3. DUALISMO ONTOLÓGICO, dualidad de mundos, el mundo de las ideas “lo bueno y lo bello” y el mundo sensible “estas cosas …de acuerdo con ella” 4. PRIORIDAD ONTOLÓGICA DE LAS IDEAS y Relación entre los dos mundos: COPIA “estas cosas las imaginamos de acuerdo con ella ( la realidad de esa clase)” 5. PERCEPCIÓN de la REALIDAD a través de los SENTIDOS, “la realidad de esta clase y a ella referimos todos los datos de nuestros sentidos” 6. Implícitamente: DUALISMO ANTROPOLÓGICO , “antes de que hallamos nacido”, “antes de que estemos en esta vida”, hay una remisión al momento en que alma y cuerpo se unen en el nacimiento a esta vida. RELACIÓN ENTRE LAS IDEAS Platón parte en su argumentación de la diferenciación entre dos niveles de realidad (lo bello y lo bueno y las cosas que imaginamos de acuerdo con ellas), para priorizar ontológicamente el primero o mundo de las ideas presentes en el texto, haciendo depender del mismo el mundo de las cosas o sensible (que imaginamos a partir de las primeras) aunque el conocimiento del primero proceda de este segundo (pues a ella referimos todos los datos de los sentidos), concluyendo la necesidad de que ese primer mundo preexista para defender en conexión con el mismo la preexistencia del alma.