La trataron como un desperdicio

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SEGURIDAD | 25

| Miércoles 12 de junio de 2013

horror en colegiales | dolor en el hogar de la familia rawson

“La trataron como un desperdicio”

Angustiada, así lo afirmó María Inés, abuela de la adolescente asesinada, y agregó: “Los argentinos nos merecemos un país en donde no haya más Ángeles”; horas de incertidumbre en el departamento de la víctima, en el barrio de Palermo Gonzalo Prado La NaCIoN

Desde fuera del edificio de Ravignani al 2360, en Palermo, se oían los llantos desgarradores de una madre que se acababa de enterar de que su hija había sido violada y asesinada. Eran las 15.30, todos los familiares de Ángeles Rawson estaban en el departamento donde vivía junto a su madre, su padrastro y sus dos hermanos mayores. Había llegado la confirmación por parte de las autoridades policiales de que el cadáver que se encontró en el predio de la Ceamse en José León Suárez era de la adolescente de 16 años. “La trataron como un desperdicio” dijo su abuela, María Inés, desgarrada por el dolor. No lo podía creer. “Los argentinos nos merecemos un país donde no haya más Ángeles. Ella era una buena estudiante, primer promedio en su colegio, y ha visto su vida tronchada. Pidamos a todos que reaccionen por favor. Que no haya más Ángeles”, finalizó la mujer, con la voz entrecortada por la emoción. Desde que trascendió que un cuerpo había sido encontrado en ese pre-

dio, el televisor en la casa de los Rawson se apagó por temor a una posible descompensación emocional de la madre y de la abuela de Ángeles. Varios familiares directos se comunicaron con la comisaría 31a. para pedir más datos y así corroborar lo que veían en portales de noticias y en las redes sociales. “Comisario, ¿cómo le va?, necesito que me diga por favor si lo que estoy viendo en Twitter es cierto. ¿Encontraron a Mumi en José León Suárez?”, preguntó desesperada una prima de Ángeles. Para no alertar a los familiares que estaban dentro del departamento se fue hasta la esquina, acompañada por otros dos familiares que tuvieron que contenerla desde que le confirmaron la terrible noticia. Minutos después, su tía Cecilia, ahogada por la angustia, fue la encargada de comunicarles a los medios de comunicación presentes lo que varios de ellos ya sabían desde hacía más de dos horas. Fue lo más breve y concisa que la situación le permitió ser. Un rato antes, su hermano mayor, de 25 años, había llegado corriendo desde la esquina, miró a las cáma-

ras de televisión con el rostro lleno de lágrimas, y gritó: “¡Díganme que es mentira, díganme que es mentira!”. No bien entró en el edificio, salió sostenido por dos amigos que lo cargaron para sentarlo en uno de los escalones de la puerta de una peluquería lindera. Su ojos miraban hacia el cielo, con la mirada perdida, bajo un fuerte estado de shock.

María Inés, la abuela, enfrenta a las cámaras

ignacio colÓ

Mumi, la mejor compañera y la mejor alumna Nadie dudaba de que iba a ser abanderada; cantaba muy bien y su pasión era el animé Felicitas Sánchez La NaCIoN

Ángeles Rawson era su nombre, pero ella en realidad era Mumi. así la conocían y la llamaban cariñosamente su amigos de 4° año de la escuela Virgen del Valle, el colegio al que iba desde que estaba en tercer grado. Mumi era la mejor alumna, la que “seguro iba a ser la abanderada el próximo año”, según dicen hoy entre lágrimas sus compañeros. Era “tranquila”, no salía mucho de noche y no le gustaba ir a bailar, como a la mayoría de los chicos del curso. Pero era, además, la compañera que siempre se hacía tiempo para ayudar al resto, la que no tenía problemas ni con sus compañeros ni con sus profesores, la que ayudaba a estudiar a los que estaban por reprobar una materia. Era también la que estaba siempre alegre y traía “buena onda” a la clase. “Yo la conocía desde hace 8 años; si le pedías ayuda siempre te daba una mano, nunca tenía problemas con nadie, era rebuena persona” contaba ayer Kevin ansalas, mientras esperaba, como perdido, con el resto de la clase, en la puerta del colegio Virgen del Valle, de Colegiales. “a mí me ayudaba a estudiar para inglés. Tenía el mejor promedio, y eso no es fácil en este colegio, pero igual se hacía el tiempo para ayudar al resto. No había nadie como ella, era la más generosa”, agregó Maximiliano Bilbao, otro amigo que se hizo Mumi en Virgen del Valle. Pero Mumi no dejaba de ser una chica de 16 años. En las paredes de su cuarto, que dejó el lunes en que desapareció desordenado con su ropa, quedan sus pósters de cómics japoneses y sus dibujos de Hello Kitty. Es que además de estudiar, le dedicaba mucho de su tiempo a

leer y a ver historietas japonesas, (animé, o manga), como Dragon Ball, o Los Caballeros del Zodíaco. Esta pasión está registrada en su muro de Facebook, donde se mezclan dibujos de sus mangas favoritos, fotos de sus amigos y de su familia, y letras de canciones. Le gustaba también el cosplay, una práctica que consiste en disfrazarse con la ropa de los personajes japoneses del animé. Muchas fotos la capturan en estos momentos de juego, con peluca y disfraz, posando frente a la cámara con sus amigos, riéndose. Lo único que parecía competir en importancia con el animé eran sus dos gatos, a los que también les dedicó innumerables fotos y mensajes cariñosos a través de las redes sociales. La música estaba muy presente en su vida. No sólo le gustaba mucho, también cantaba muy bien. “Lo que más le gustaba eran el animé y el rock; siempre era amable y alegre. Nunca va a haber otra chica como ella.” trataba de resumir con dificultad, ayer, su amigo Federico aparicio. “además de todo, cantaba increíble”, agregó Maximiliano Bilbao. El grupo norteamericano de rock alternativo Linkin Park era su banda favorita. “Ella justo estaba volviendo a cantar, que era algo que le encantaba hacer”, señaló su amiga Camila Navarro, y explicó que junto con sus compañeros del curso se encargaron de hacer los afiches con la foto de Mumi cuando no apareció el lunes. “Yo la vi en la esquina de Concepción arenal y Cramer, cuando salimos del campo de deportes. Nos despedimos con un “nos vemos despúes”. ahora estamos destrozados” agregó Camila. Uno de los últimos mensajes que la adolescente dejó en su propio muro de facebook dice “I have to find you, tell you I need you” (Necesito encontrarte y decirte que te necesito), verso de una canción de la banda inglesa Coldplay. Debajo de la frase hay una imagen de una película de Disney, donde una princesa besa a un héroe.ß

Solidaridad y estupor en las redes sociales Usuarios de Twitter y Facebook acompañaron la búsqueda y luego condenaron el asesinato

Ángeles “Mumi” Rawson

facebook

Los compañeros de escuela de Ángeles, desconsolados

H. Zenteno

El resumen de todos los miedos el escenario Fernando Rodríguez La NaCIoN

C

ualquier explicación se vuelve inútil ante la evidencia: en uno de los barrios más populosos de la Capital, una chica de 16 años puede ser raptada a plena luz del día, violada y asesinada, y su cuerpo, desechado en la misma zona. Esa descripción es el resumen de los miedos que atenazan a los ciudadanos en torno a la inseguridad. La vía pública, abandonada de la suficiente prevención, es, hoy, escenario de amenazas criminales múltiples. Mucho se ha dicho del aporte de la

tecnología para la prevención; las cámaras de seguridad aparecen como una herramienta ponderada por las autoridades. De nada sirvieron para evitar que a Ángeles Rawson le ocurriera lo que le ocurrió. En el mejor de los casos, las imágenes proveerán información para esclarecer el crimen, ya no para impedirlo. Los gobiernos –el nacional, con la Policía Federal, y el local, con la Metropolitana– pueden dar respuestas inmediatas: desde las tradicionales, como la mejora de los patrullajes policiales, hasta novedosas y con abordajes integrales, como los corredores escolares seguros. además de la prevención física, las autoridades de las áreas de Segu-

Las horas de incertidumbre Su padrastro, Sergio, habló con todos los periodistas presentes para tener novedades sobre Ángeles. a todos les agradecía entre lágrimas. Su madre sólo pudo salir una sola vez a la calle para hablar. Sostenía un retrato de Ángeles. El dolor de recordar las últimas 24 horas pareció ser muy fuerte para ella. En todo momento hacía hincapié en que no perdía las esperanzas de que su hija iba a aparecer sana y salva. Su madre, María Inés, con gran temple, la acompañaba para darle fuerzas. “Estoy pensando siempre en positivo, pensando en que ella está desesperada por llamarme y comunicarse conmigo”, dijo su madre en su única declaración a la prensa, Cerca de las 18, luego de que la

noticia había sido confirmada por la policía, muchísimas personas comenzaron a detenerse en la puerta del edificio, lo que provocó que se cortara la calle. Casi un centenar de familiares, amigos, vecinos y compañeros de colegio y del instituto de Ángeles se acercaron para contener a los padres de Ángeles. a las 19, el secretario de Seguridad, Sergio Berni, estuvo algunos minutos en el departamento de los Rawson y se retiró sin hacer declaraciones. Desde el gobierno porteño también se comunicaron con la familia Rawson. El ministro de Seguridad y Justicia, Guillermo Montenegro, habló con la familia y, a su vez, les informó que estaban revisando las grabaciones de las cámaras de seguridad en busca de alguna pista para esclarecer el hecho. Desde que Ángeles desapareció, su cuarto permaneció igual. Su notebook todavía tenía abierto su Facebook, que en un principio fue usado por sus padres para recolectar información sobre su paradero. Luego su “muro” se convirtió en un lista interminable de condolencias.ß

ridad y de Justicia deben disponer de suficiente información de inteligencia criminal para conocer los peligros de cada zona y adelantarse a los acontecimientos. Esa información se produce con trabajo de calle hecho por personal especializado, pero también con un exhaustivo entrecruzamiento de datos de causas judiciales, en busca de factores comunes de casos en una zona determinada. además, es importante que las autoridades policiales y políticas presten especial atención a lo que el ciudadano dice: los vecinos pueden y deben ser sus ojos y sus oídos en materia de prevención. La participación de la sociedad también hace la diferencia en mate-

ria de prevención; la organización de alertas vecinales en determinadas cuadras ha mostrado resultados allí donde se la ha aplicado. Lo mismo ocurre con los foros de seguridad en los que se recopilan experiencias para sistematizarlas y enfocar los pedido a las autoridades. La conmoción que producen estos crímenes despierta el pedido de rápidas respuestas. Más que de soluciones facilistas, estigmatizantes o de caza de brujas, de lo que sí se puede esperar resultado es del análisis, de las acciones preventivas coordinadas y del trabajo intergubernamental abierto al aporte de la sociedad. Sólo así las calles dejarán de ser tierra de nadie.ß

Una vez más, los usuarios de las redes sociales replicaron en Facebook y Twitter las sensaciones generalizas, primero, de desesperación por la búsqueda de Ángeles Rawson y, luego, de indignación por su brutal asesinato. En Facebook, fue Jimena Mery aduriz, madre de Ángeles, quien posteó el comentario original alrededor de las 9 de ayer. “Por favor, mi hija Ángeles “Mumi” Rawson está desaparecida desde ayer a las 10. Fue vista por última vez en Costa Rica y Dorrego y nunca llegó a casa. Les pido que por favor pasen esta foto. Ya está hecha la denuncia (...) estamos desesperados. Gracias, Jime”, escribió en su muro y etiquetó a la hija, en un intento por conectarla. La publicación fue compartida por 4826 contactos de Jimena. La alerta se reprodujo en la página creada especialmente “Busquemos a Ángeles Rawson”. Se convocaba, además, para una marcha a las 19 frente a la Catedral, para que el reclamo cobrara la fuerza de la masividad. Llevar fotos de “Mumi” para repartir era la consigna. El pedido de ayuda para recuperar a Ángeles se reprodujo por Twitter.

Los mensajes solicitaban retuitear “Ángeles Rawson (16 años) desapareció ayer en Palermo”, junto con los teléfonos de contacto y links con más información. La solidaridad para difundir la búsqueda de la familia mutó en profunda tristeza y reclamo de justicia cuando se conoció el hallazgo del cadáver de la adolescente. El “Busquemos a Ángeles Rawson” fue superado por otros dos grupos “Justicia por Ángeles Rawson” y “Ángeles Rawson siempre presente”. “¿Fútbol para Todos? Por favor, ¡justicia para todos! Cárcel para estos malparidos. ¿Dónde estamos viviendo? ¿Dónde están los políticos, dónde están los dirigentes políticos?”, se indignó, por ejemplo, Miriam Bolgiani. Y Elsa Hebe Medina exigió: “¡No queremos más Ángeles! alguien tiene que reaccionar. Pésame para la familia”. En Twitter se propagaron la condena a la inseguridad reinante y el reclamo de justicia por el crimen de la adolescente. algunos políticos también emitieron su opinión. “El horror, asesinato y violación de Ángeles nos interpela sobre la necesidad de construir en serio una respuesta a la inseguridad”, escribió Patricia Bullrich. María Luján Rey, madre de Lucas, fallecido en once, y Susana Trimarco, madre de Marita Verón, enviaron sus condolencias a la familia.ß