Monseñor Ruta: En eí año 1983 y a través de un amigo en común, tuve d privilegio de conocer a Monseñor Juan Caríbs Ruta. Desde entonces lo frecuenté muy a menudo hasta que Dios lo llamó definitivamente a su lado. Es muy difícil contar todo lo que fue, la gran persona, el sacerdote, el amigo. Lo primero que vi en él fue su gran Bondad, su disposición a recibir y escuchar a quien iba a su encuentro. Su comprensión y valorización del otro; su gran humildad que resaltaba más aún, dado el altísimo desarrollo y elevación de su pensamiento y de su cultura. Siempre me ha deslumbrado el Apóstol San Juan y considero que en él está la máxima expresión de la espiritualidad y el misticismo que el hombre puede encontrar. Vi en Monseñor Ruta uno de los muchos discípulos de San Juan a lo Cargo de la riquísima historia de la Iglesia. Los libros de Monseñor Ruta son expresión cabal de lo que digo. Siendo una persona tan admirable y con tantos valores, era al mismo tiempo tan cercano, tan amigo, tan afectuoso con todo el que lo trataba. Siempre dispuesto a valorar al otro y a alentarlo en su vida. Monseñor Juan Carlos Ruta: gran persona, gran sacerdote, gran amigo: su ejemplo me inspira, me eleva a Dios y me compromete en mi vida de sacerdote. ¡Doy gracias a Dios! por haber sido amigo de este cristiano excepcional.-

Pbro. Isidro O. Marchuela Olavarría, junio de 2009.