Los 150 años del ferrocarril, entre el apogeo y la

30 ago. 2007 - Los 150 años del ferrocarril, entre el apogeo y la decadencia. Entre un pasado de esplendor y un presente
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Información general

Jueves 30 de agosto de 2007

LA NACION/Página 17

Presentación del ombudsman ante la Corte

Una historia más que centenaria

FICHA TECNICA

El primer tren del país comenzó a circular el 30 de agosto de 1857 LA RED FERROVIARIA

Fabricante E.B.Wilson, de Railway Foundry Leeds, Inglaterra

LA PORTEÑA, LA PRIMERA LOCOMOTORA Ingreso del carbón

CARBON Mediados del S XX

Ingreso del agua

AGUA

Se quemaba para obtener calor.

Velocidad 25 km por hora

Era calentada en la caldera hasta su punto de ebullición.

Capacidad Dos vagones con 30 pasajeros cada uno Peso 15.750 kg Trocha ancha 1,65 m

Del vapor al movimiento 3 Este movimiento horizontal era traducido a un movimiento circular contínuo, posibilitando el avance del tren.

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Un mecanismo de doble entrada ejercía presión a ambos lados de un pistón provocando su movimiento.

El agua en ebullición se transforma en vapor produciendo presión.

OS VAGONES

Vagones de madera con nteriores lujosos alumbrados on lámparas de aceite.

ña permaneció

Plaza del Parque

El trayecto Desde Plaza del Parque, actual Plaza Lavalle, con una parada en Estación 11 de Septiembre, hasta Estación Flores.

Longitud

10 km

Duración

35 min.

Estación Flores

Fuente: Museo del Transporte de Luján. Roberto Grin, director.

Estación 11 de Septiembre

Florencia Abd / LA NACION

Los 150 años del ferrocarril, entre el apogeo y la decadencia Hubo 47.000 km de vías operativas, hoy no llegan al 20%; la vuelta de La Porteña Por Franco Varise De la Redacción de LA NACION Entre un pasado de esplendor y un presente de sinsabores pasaron ya 150 años. Hoy se cumple un siglo y medio desde que un tren recorrió apenas 10 km entre el centro de la ciudad de Buenos Aires y el barrio de Floresta, el 30 de agosto de 1857. Transcurrieron, así, 1800 meses desde que el ferrocarril comenzó a formar parte de la vida cotidiana de los habitantes de un país con casi cuatro millones de kilómetros cuadrados. El aniversario, de todos modos, encierra buenas y malas noticias. Las buenas: el país puede jactarse todavía de contar con el trazado de vías más grande de América latina; las malas: que apenas permanece operable menos del 20% de esa red que, en algún momento, funcionó sobre 47.000 km de recorrido. El día inaugural del ferrocarril, el 29 de agosto –uno antes del primer viaje-, unas 60.000 personas, según las crónicas de la época, habían colmado los alrededores de las calles Tucumán y Cerrito, donde hoy funciona el Tea-

tro Colón y que, por entonces, era la Estación El Parque. Curiosos por la novedad, todos querían apreciar la “locomotora o locomotiva”, que representaba el paradigma del desarrollo, la modernidad y la pujanza. Además de un hito, significó también una amenaza para la tracción a sangre que, por aquellos años, monopolizaba el transporte de Buenos Aires.

Una mole de 16 toneladas La locomotora era La Porteña, una mole de 16 toneladas con tres coches, con capacidad para 26 pasajeros cada uno, que cargaba con la leyenda de haber sido construida para la India y empleada en el sitio de Sebastopol, durante la guerra de Crimea. Un caballo de metal proveniente de Liverpool, Inglaterra, fabricado por The Railway Foundry Leeds, capaz de avanzar a 25 km/h. Según cuenta el anecdotario, previo a la inauguración, hubo ensayos del convoy, en los cuales se produjeron descarrilamientos. Las seis personas encargadas de hacer correr el tren, no obstante, prometieron guardar en secreto aquellos incidentes para no alentar el pánico entre el públi-

co que aún veía con desconfianza un transporte que echaba humo por la chimenea y andaba sobre rieles. La Porteña, adquirida por la Sociedad Caminos del Hierro de Buenos Aires (integrada por un grupo de hombres visionarios) actualmente permanece en el museo de Luján. Por estos días, dos especialistas restauran la vieja locomotora que volvería a ponerse en marcha el 17 de octubre próximo, en oportunidad del aniversario de esa ciudad. Como testimonio de los 150 años, La Porteña estará en exhibición, junto con otras joyas -como los coches presidenciales utilizados por Hipólito Yrigoyen y Eva Perón- en el predio rural de Palermo donde se realizará, a partir de hoy, el XXI Congreso Panamericano de Ferrocarriles. También se realizará un viaje en una formación que data de 1888, desde la Estación Lynch del Ferrocarril Urquiza. Sin embargo, con el paso de las décadas el tren en la Argentina “perdió el tren” –valga la ironía– y, a pesar de la ventajas, en cuanto a costo y comodidad, nunca más volvió a ser lo que fue en algún momento. Hace tiempo que viajar en ferrocarril es

una odisea diaria. El 15 de mayo pasado, pasajeros de la línea del ferrocarril Roca, provocaron destrozos en la estación Constitución, por la que transitan unas 400.000 personas diariamente.

El tren bala A su vez, en contraste con la emergencia y el colapso del ferrocarril a pesar a los subsidios millonarios del Estado, el tren bala que uniría en menos de tres horas y a 320 km por hora Buenos Aires con Rosario y Córdoba se presenta como una bocanada de aire fresco. El ramal fue preadjudicado al consorcio Veloxia –liderado por la francesa Alstom– y la obra, llave en mano, demandaría al Estado unos 1350 millones de dólares como mínimo. Todavía no se sabe cuándo empezaría a construirse. “Con el ferrocarril hay que hacer como hizo Jesús con Lázaro: decirle «levántate y anda», pero con inversión de capital privado y el control del Estado para determinar dónde tiene que ir”, opinó el ex diputado justicialista y presidente de la asociación que organiza el Congreso, Lorenzo Pepe.

Denuncian que la Cámara alta demora una sanción

Reclamo de discapacitados al Congreso Exigen una ley para poder acceder a beneficios que ya les fueron concedidos Por Cynthia Palacios De la Redacción de LA NACION Para reclamar que se garantice el acceso a un certificado de discapacidad en todo el país y se ratifique la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad de Naciones Unidas, cerca de 200 personas con discapacidad, amigos y familiares realizaron ayer un abrazo al Congreso Nacional. “Venimos a pedirles a los senadores que traten el proyecto de ley sobre el certificado de discapacidad que fue aprobado por unanimidad en la Cámara de Diputados en 2006 y que durante este año todavía no se trató”, denunció el sacerdote Pablo Molero, presidente del Foro Permanente por la Promoción y la Defensa de los Derechos de las Personas con Discapacidad, que convocó al abrazo. “El certificado es la llave para hacer uso de los derechos que tienen las personas con discapacidad”, aseguró Molero, que lamentó que el 80 por ciento de las personas con discapacidad en la Argentina –cerca de dos millones de personas– no lo tiene, mientras que el 3% desconoce que pueden realizar ese trámite y sólo el 14% cuenta con el certificado. Esto se traduce en que la mayoría de ellos no gozan de los derechos y benefi-

ANIBAL GRECO

El carnet que piden les permite el acceso a pensiones y a tratamientos

cios que el certificado concede, como el acceso al transporte público, pensiones, escolaridad, tratamientos de rehabilitación o a la colocación de prótesis. “En nuestro país, que hace más de 20 años se trabaja el tema de la certificación de la discapacidad, no es posible que el 80% de las personas con discapacidad no tenga su certificado. Hay un problema grave de decisión política”, se quejó Molero. Durante la protesta, instalaron una

enorme silla de ruedas inflable frente al Congreso. Los organizadores tenían previsto reunirse con el vicepresidente Daniel Scioli para entregarle una carta con los reclamos, pero fueron recibidos por el director de Relaciones Institucionales de la Presidencia del Senado, Ignacio Méndez. “Hablé con Scioli por teléfono y pidió disculpas por no haber podido estar presente, porque estaba engripado y tenía que viajar para San-

ta Fe, pero se comprometió a tomar el tema”, explicó el sacerdote. El proyecto del ley aprobado en la Cámara baja permite que las personas con discapacidad motora, auditiva o mental puedan tramitar su certificado en el hospital más cercano a su domicilio y asegurar su validez en todo el país. La unificación de los certificados es un tema clave: las credenciales provinciales no son válidas en todo el país. “Desde noviembre no hay novedades con el proyecto de ley de unificación de certificados. Realmente es vergonzoso”, protestó Molero. “Los diputados aprobaron unánimemente el proyecto que facilita la obtención del certificado de discapacidad en todos los hospitales públicos del país, sean ellos municipales, provinciales o nacionales y que tendrá validez nacional; pero los señores senadores aún no se dignan a tratarlo en las comisiones a las que fue girado”, opinó la presidenta de la Comisión de Discapacidad, la diputada nacional Lucrecia Monti, autora del proyecto. “No hay justificación para retrasar su tratamiento. Es incomprensible que los senadores, en lugar de allanar el camino hacia la defensa de los derechos de las personas con discapacidad, lo obstaculicen con su negativa a tratarlo”, sostuvo la diputada del Partido Justicialista.

Demandan al Chaco y al Estado nacional por “exterminio aborigen” Piden acciones rápidas de los gobiernos Por José Derewicki Para LA NACION RESISTENCIA.– El defensor del pueblo de la Nación, Guillermo Mondino, presentó ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación una demanda contra la provincia del Chaco y contra el Estado nacional, por la que solicita que se detenga “el exterminio de comunidades aborígenes tobas” que habitan ese territorio provincial. En la presentación, Mondino advirtió que, si no se realizan acciones inmediatas, las poblaciones aborígenes tenderán a desaparecer. En su demanda, Mondino solicitó que se ordenara a la provincia del Chaco y al gobierno nacional adoptar “las medidas que sean necesarias para modificar las actuales condiciones de vida de las poblaciones que se encuentran en una situación de exterminio silencioso, progresivo, sistemático e inexorable”. El reclamo se funda en un relevamiento realizado por personal de la Defensoría del Pueblo de la Nación en comunidades aborígenes que habitan la zona sudeste del departamento de General Güemes y noroeste del departamento de Libertador General San Martín. Según el informe, se ha podido verificar que “[los aborígenes] viven en ranchos de barro y ramas, en extremo precarios, donde anidan las vinchucas y que, en los últimos 30 años, no se fumigó en contra del insecto transmisor del mal de Chagas, salvo excepciones”.

Falta alimentación Muchos de los aborígenes que fueron entrevistados para el técnicos de la Defensoría dijeron no tener una alimentación adecuada. Fueron varias las personas que afirmaron que, en ocasiones, pasan dos o tres días sin comer nada. LA NACION pudo comprobar esa situación durante una cobertura que fue publicada recientemente. “No tienen agua potable, ya que en casi todos los lugares visitados el agua que se utiliza para beber proviene de charcos o represas que son los mismos en los cuales beben los animales del lugar”, se explica en el informe. Hay zonas, como la que comprende el puesto sanitario El Espinillo, en la cual por lo menos el 50% de la pobla-

ción es chagásica y el 25% tiene alguna discapacidad. Los niños nacen, por lo general, con bajo peso. En el mismo puesto sanitario se informó acerca de la existencia de numerosos pacientes con tuberculosis activa. En el puesto sanitario de Villa Río Bermejito se informó que el cuadro de desnutrición más alto se verifica entre los adultos mayores quienes, a partir de los 60 años, poseen altos grados de desnutrición, tuberculosis, neumonía y bronquitis. Según informaron en el hospital Güemes, que atiende las necesidades de las zonas aledañas a Castelli, sobre un universo de entre 75.000 y 80.000 consultas anuales, el 37% de las personas que se presentan a donar sangre son chagásicas.

ARCHIVO

El defensor Guillermo Mondino

También surgen del informe de la Defensoría del Pueblo de la Nación las dificultades de la población para obtener atención médica, ya que les resulta sumamente difícil, cuando no imposible, acceder a puestos sanitarios, hospitales y medicamentos. Mondino reclamó que se tomaran las medidas necesarias para garantizar a los pobladores de la región una real y efectiva calidad de vida digna, que les permita el ejercicio de los siguientes derechos: ● a la vida, ● a la salud, ● a la asistencia médico-social, ● a la alimentación, ● al agua potable, ● a la educación, ● a una vivienda digna, ● al bienestar general, ● a la inclusión social.

Niegan que se discrimine RESISTENCIA.– El ministro de Salud de la provincia, Ricardo Mayol, dijo que ninguna de las muertes de aborígenes que se conocieron a través de los medios de comunicación tuvo como causa central la desnutrición, y entregó un resumen de las historias clínicas de 13 indígenas fallecidos, en el que se consigna que los decesos tuvieron otros motivos. “Esta campaña de desprestigio dejará secuelas en la imagen de la provincia, no sólo en el nivel nacional, sino incluso internacionalmente”, sostuvo. El ministro de Salud defendió la política sanitaria oficial y negó discriminación hacia las comunidades aborígenes. El funcionario provincial atribuyó las repercusiones periodísticas a fines electorales. Cuando fue consultado sobre si el gobierno reconocía errores en la política sanitaria dirigida a los pueblos originarios, Mayol respondió: “No somos

perfectos y seguro que hubo errores”. El funcionario dijo que no se buscó tener “una mirada especial” sobre tobas, mocovíes y wichis porque la política oficial “no discrimina entre criollos y aborígenes”. Explicó que los errores que pudo haber cometido el gobierno provincial fueron las “estrategias de comunicación para lograr que las comunidades aborígenes hagan uso de la red estatal de atención. “Trabajamos como lo teníamos programado”, dijo el ministro, que también afirmó desconocer una nueva denuncia del Centro de Estudios Nelson Mandela sobre el fallecimiento de otra persona aborigen por falta de atención. “Desde Buenos Aires me hicieron una consulta y averigüé que en Castelli falleció una ciudadana de nombre Cipriana, por un accidente cerebrovascular; no estaba desnutrida”, ejemplificó el ministro.