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(Tumaco, Ipiales, Puerto Leguízamo y Mocoa-Sibundoy por Colombia; Esmeraldas, Tulcán,. Ibarra y Sucumbíos por el Ecuador
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Septiembre - Diciembre de 2004 Boletin Trimestral No. 23 CREDITOS..................................................................................................................................................2 EDITORIAL................................................................................................................................................3 SAN ANDRES DE TUMACO..................................................................................................................4 A MANERA DE INTRODUCCIÓN...................................................................................................4 EL ORIGEN DE LAS ISLAS DE TUMACO ......................................................................................7 BREVE RESEÑA HISTÓRICA DE TUMACO ..................................................................................9 TUMATAI “LA TIERRA DEL HOMBRE BUENO”......................................................................10 CONTEXTO GEOGRAFICO Y DEMOGRÁFICO..........................................................................11 PROBLEMÁTICA ...............................................................................................................................13 CARACTERIZACION DE LA POBLACIÓN DESPLAZADA..........................................................17 1. PROCESO DE RECOLECCIÓN DE INFORMACIÓN ..............................................................17 1.1. METODOLOGÍA DEL CENSO.............................................................................................18 1.2. CAPACITACIÓN....................................................................................................................19 1.3. RESULTADOS CENSO ..........................................................................................................19 1.4. VISIBILIZACION DE LOS RESULTADOS .........................................................................22 2. ANÁLISIS DE LOS DATOS OBTENIDOS ..................................................................................22 2.1. COMUNIDAD DESPLAZADA SEGÚN AÑOS DE RECEPCION ..................................22 2.2. COMUNIDADES EXPULSORAS .........................................................................................23 2.3. EXTENSIÓN DE TIERRA ABANDONADA.......................................................................24 2.4. COMPOSICIÓN FAMILIAR POR EDAD Y SEXO ............................................................25 2.5. PRINCIPALES NECESIDADES DE LA POBLACIÓN ......................................................26 2.6. DESEO DE UBICACIÓN DE LA POBLACIÓN DESPLAZADA .....................................27 2.7. ACTORES Y MOTIVOS CAUSANTES DEL DESPLAZAMIENTO ................................28 2.8. PERTENENCIA A ORGANIZACIONES SOCIALES........................................................29 2.9 PERTENENCIA A MINORIAS ÉTNICAS ..........................................................................29 2.10. ENFERMEDADES PRESENTADAS DURANTE EL DESPLAZAMIENTO.................30 2.11. OCUPACIÓN ANTERIOR Y ACTUAL DE LA POBLACIÓN DESPLAZADA ..........30 2.12. EDUCACIÓN ANTES Y DESPUÉS DEL DESPLAZAMIENTO ....................................31 XX ANIVERSARIO DE LA DECLARACIÓN DE CARTAGENA ....................................................40 Plan de Acción de México .................................................................................................................40 SABIA USTED?........................................................................................................................................42 PRINCIPIOS RECTORES Y CONSTITUCIÓN...............................................................................42 VATICANO A LA ONU:...................................................................................................................42

CREDITOS CONFERENCIA EPISCOPAL DE COLOMBIA Secretariado Nal. de Pastoral Social Director Mons. Héctor Fabio Henao Gaviria Sección de Movilidad Humana Coordinador P. Maurizio Pontín c.s. Obispos Asesores Mons. Nel H. Beltrán Santamaría Mons. Francisco Javier Múnera Correa Editor Secretariado Nal. de Pastoral Social Director P. Maurizio Pontin, c.s. Comité de Investigación y Redacción P. Maurizio Pontin, c.s. Rodrigo García Tellez Fanny Uribe Idárraga Rosa María Martín A. Leonardo Guerrero Procesamiento de Datos, Gráficas y Tablas Rodrigo García Tellez Diseño y Diagramación Villamira Castro L. Impresión Editorial Kimpres Informes Cra. 47 No. 84-85, A.A. 59206 Tels: 57-1 - 437 71 50 Fax: 57-1 - 311 50 58 e-mail: [email protected] http://www.pastoralsocialcolombia.org Bogotá – Colombia Texto completo en el Web http://www.disaster-info.net/desplazados/informes/rut/23/

EDITORIAL Durante este año hemos tenido la oportunidad de contactar diferentes personas en situación de desplazamiento situadas en diferentes lugares del país como Guaviare, Risaralda, Meta, Caquetá. También hemos analizado la situación específica como la de la Comunidad de los Kankuamos o el papel protagónico de la mujer en situación de desplazamiento. En total, durante el año hemos introducido en el sistema a 14.966 núcleos familiares para un total de 72.133 personas, dato que nos permite mejorar la caracterización que periódicamente presentamos. En esta ocasión, después de los cuadros que resumen la ubicación y la situación escolar de la población registrada en el Sistema RUT del Secretariado Nacional de Pastoral Social, pasamos a describir y analizar la situación de las víctimas del desplazamiento forzado en la ciudad de Tumaco. Tumaco es otra de las numerosas ciudades intermedias de Colombia de las cuales poco se habla, pero que presenta un cuadro dramático en lo que se refiere a las necesidades básicas insatisfechas de la población en situación de desplazamiento y de los tumaqueños en general. En el estudio de caso realizado en la ciudad de Florencia en el mes de junio de este año se ha encontrado que la población allí residente está formada en un 10% por personas en situación de desplazamiento; situación que no ha mejorado durante el resto del año. En el caso de Tumaco se ha revelado que por lo menos el 5 % de su población está en la misma dolorosa situación. Y lo más grave es que esta población se inserta en el contexto urbano de los estratos más bajos de la sociedad receptora. Esto significa que, si la población de la ciudad está constituida en un 60% por personas situadas en los estratos 1 y 2, la presencia tan numerosa de población desplazada, que se va ubicando entre ellos, hace que la situación empeore y revista carácter extremo de emergencia social y humanitaria. Con estos datos a mano es difícil sostener que la situación social del país ha mejorado últimamente. Todos sabemos que las estadísticas reflejan la realidad en forma muy parcial y es fácil imaginar que, lo que dicen del país en general, seguramente no puede ser aplicado ni para Tumaco, ni para Florencia, como tampoco para Cúcuta o la mayoría de la población de Cartagena o Barranquilla, y tampoco para otras ciudades hacia los cuales siguen confluyendo cada día decenas de familias víctimas del conflicto interno que vive el país. La rentabilidad financiera, el aumento del PIB, las ganancias de las multinacionales no se reflejan en las cifras de desempleo que se recogen entre la población de las periferias urbanas, especialmente si éstas están conformadas por población desplazada. A esta realidad hay que añadir el creciente número de población que se encuentra sitiada por los diferentes grupos armados y no puede moverse para buscar mejores fuentes de trabajo o seguridad personal y colectiva. P. Maurizio Pontin, c.s.

SAN ANDRES DE TUMACO Una riqueza oculta en el ecosistema y en su gente ESTUDIO DE CASO SOBRE DESPLAZAMIENTO FORZADO TUMACO

A MANERA DE INTRODUCCIÓN “En nombre de Dios, pues, y en nombre de este sufrido pueblo, cuyos lamentos suben hasta el cielo cada día más tumultuosos, les suplico, les ruego ¡les ordeno!, en nombre de Dios: ¡cese la represión!” (Mons. Oscar Arnulfo Romero) Cada día se desearía que en Colombia las noticias sobre violencia, combates, desplazamiento forzados que vemos, oímos, leemos en los medios de comunicación y que muchos colombianos viven en carne propia, fueran disminuyendo. Anhelamos que un ángel caído del cielo reemplazara las nefastas noticias por “Buenas Nuevas”; soñamos con el día en que los campos sembrados de minas se transformen en campos sembrados de productos agrícolas; aspiramos que la palabra del profeta Isaías “cambiar las espadas por arados, las lanzas por podaderas” sean una realidad. Deseamos... anhelamos... soñamos... aspiramos... y esperamos, ¡Esperamos! Esperamos con la esperanza viva del creyente, que nos pide actuar frente a la realidad y no verla como simples espectadores, que la observan maquillada por la caja mágica (o la caja boba). Llamados a ser portadores de la Esperanza, aquella que hace que muchos de nuestros hermanos desplazados no se rindan ni se dejen vencer; propiciadores de la reconciliación pero con la puesta clara por que ella se de a través de la Verdad; convocados a cumplir con la expectativa del Papa Pablo VI de brindar a los demás “razones para vivir y razones para esperar”. Pero muchas veces solo esperamos... Como en una sala de espera en una clínica, a la espera que se haga un milagro, a la espera que el médico cumpla con su tarea, a la espera de lo que muchas veces parece imposible. Ese tipo de espera no genera esperanza, genera angustia, desconcierto,

desesperanza. Si como colombianos anhelamos la Paz debemos ser constructores de ella, protagonistas de ella, capaces de transformar desde nuestra realidad las estructuras injustas de pecado que generan violencia, hambre, pobreza y muerte. La fe de un creyente no es solo la búsqueda del Creador por un camino espiritual; también es la búsqueda del rostro de Dios en cada hermano que ríe o que sufre, que vive o muere. La fe exige la práctica de las obras y las obras piden mucho de fe para realizarlas; para que no decaigamos ante la magnitud del fenómeno de la violencia, del desplazamiento, del horror mismo de la guerra. Porque cuando la cruda realidad supera nuestras capacidades de transformarla necesitamos mucho de la fe para saber que lo que hacemos ayuda a encontrar la luz al final del túnel. Cada día, en Colombia, se debe despertar una conciencia más clara frente al clamor de la población en situación de desplazamiento, “de este ensordecedor grito del pueblo... que pide justicia...” y no ser llevado al olvido, al rincón de la sociedad donde muchos son ignorados o se vuelven invisibles.

*Los nombres y sitios ha sido cambiados por seguridad de los declarantes Testimonio 1: “...la reacción que tomamos los habitantes fue huir por el número de disparos que estos dos grupos (FARC y AUC) ocasionaron; unos se metieron debajo de las camas, otros se fueron hacia dentro de las casas y otros se desplazaron. Cosa que la vereda se quedó sola; en estos momentos no hay habitantes en ese sitio donde ellos se enfrentaron. En aquel suceso muchas personas se desaparecieron... desde aquel enfrentamiento los habitantes de esta comunidad no pueden tener tranquilidad, viven asustados de alguna retenida por parte de los grupos”

Sabemos que la crisis humanitaria cada día se torna más angustiosa en todo el país, (*Don Roque – habitante vereda La Temerosa”) y de ellos somos muchos más conscientes en nuestra región pacífica nariñense. Una región donde el olvido gubernamental campea, donde las necesidades básicas insatisfechas (NBI) tienen niveles tan altos que fácilmente superan a países en condiciones económicas más precarias que el nuestro como Haití o Bolivia. A esto se le une un problema mayor: la grave crisis humanitaria que se vive en los últimos años. Crisis que se ve reflejada en el número de familias desplazadas de los municipios de la costa hacia Tumaco o hacia Pasto, la capital del departamento. Si comparamos el número de pobladores de esta región pacifica (309.006 habitantes, según cifras oficiales) con el número de personas desplazadas (aproximadamente 10.000, según cifras del RUT) el problema es grave, grande... pero lastimosamente muy poco visible a los ojos del país entero.

A partir del lugar social donde nos colocamos, a partir de la óptica con la que vemos el mundo y sus acontecimientos, a partir de la conciencia propia del ser de cada uno de los pobladores afrodescendientes de esta región, podemos ir construyendo soluciones y caminos con esperanza. Mirando a partir del pueblo afrodescendiente podemos constatar la presencia de un Dios liberador que toma las facciones del hombre y de la mujer afro, de un pueblo que no está enmarcado en los esquemas tradicionales. Podemos constatar la presencia de un Dios dinámico que camina y anima la lucha de toda una comunidad que ESPERA ver un futuro distinto donde sus derechos sean respetados, sus sueños no sean aplastados y sus convicciones sean tenidas en cuenta para su libre desarrollo. Un pueblo donde la alegría, la confianza y los brazos abiertos hacen parte de su modo de ser no pueden ser cambiados por la tristeza en los rostros de los niños, la inseguridad frente al extraño y las puertas cerradas por la soledad de sus moradas. Si cada pueblo posee la libertad de determinar su futuro, este pueblo de la Costa Pacífica reclama su aspiración válida de vivir en paz, de buscar caminos para su desarrollo, de anhelar, soñar, desear, aspirar y esperar... esperar que el mañana traiga –como el mar a la playa- buenas nuevas reflejadas en mejor servicio de salud, de energía, de vivienda, de educación y de empleo. Nosotros como Iglesia Católica, desde la Pastoral Social, colocamos nuestra fe junto con sus exigencias prácticas para acercarnos como Pueblo de Dios cada día más a esta aspiración. “Que las Madres de la Plaza de Mayo / alaridos como dolores de parto / consigan dar a luz / al Hombre Nuevo, / al Pueblo libre, / la Gran Patria Amerindia, negra, criolla, ella” (P. Casaldaliga. Experiencia de Dios y Pasión por el pueblo). JUAN PABLO VILLOTA VILLARREAL Pastoral Social de Tumaco – Área de Vida, Justicia y Paz

Narración mitológica:

EL ORIGEN DE LAS ISLAS DE TUMACO Al comienzo de los tiempos, *Los nombres y sitios ha sido cambiados por seguridad de los declarantes unos inmensos peces rojos salieron desde un lugar muy lejano a recorrer los mares del Testimonio 2: mundo. Eran tres vigorosos pargos rojos. Fueron enviados “En nuestra comunidad hubo un desplazamiento que se por Yemayá, madre de la vida y enfrentaron el ejército con la guerrilla; tuvimos que salir huyendo de las aguas, a reconocer sus de nuestras casas y esto sucedió en la comunidad de Río Piedras* y dominios. Durante miles de en El Rincón* ocurrió lo mismo: subió un grupo de paramilitares y años navegaron por todos los las personas salieron corriendo pero principalmente lo primero que océanos de la tierra. Un día se se hizo fue salvar a los niños. Sufrimos mucho por culpa de los sintieron fatigados y se grupos armados... quedaron a descansar en los esteros de la costa pacífica En El Escondedero* pasó lo mismo cuando estaban los “paras”; nariñense; la brisa de la tarde ellos amenazaron con acabar con la comunidad, se enteraron de lo los adormeció, las olas los que iba a pasar salieron desplazados pero todos desesperados por dejar las casas solas y tener que abandonar todas sus pertenencias... arrullaron y pronto se Nosotros como civiles tenemos derecho a la verdad, a no ser quedaron profundamente explotados por los demás” dormidos. Poco a poco las mareas infatigables los (*Doña Flor María – habitante vereda Río Piedras durante un taller cubrieron de arena y después de D.I.H) una frondosa vegetación apareció sobre sus lomos y las lluvias torrenciales formaron riachuelos caudalosos. Así aparecieron las tres islas mayores que hacen parte del archipiélago de San Andrés de Tumaco. Los abuelos dicen que las detonaciones producidas por la dinamita que utilizan algunos pescadores pueden perturban el milenario sueño de los peces que sostienen las islas. Cuando los míticos pargos rojos se desperezan, provocan gigantescos oleajes que inundan las calles y barrios de Tumaco. Cada cierto tiempo, los inmensos pargos rojos que sostienen las islas de Tumaco se mueven debajo de las aguas para cambiar de costado y desentumecerse. Cuando así ocurre, el mar y la tierra se agitan violentamente provocando cataclismos y tragedias dolorosas. Los primeros pobladores de estas islas fueron unos indígenas trashumantes que cultivaban el maíz y la yuca. Además, eran pescadores y cazaban

pequeños animales. Construyeron casas de madera con techos de hojas de palma. Eran expertos alfareros y orfebres incomparables. Adoraban como dioses al jaguar y a la anaconda. Desaparecieron misteriosamente de estas tierras después de un milenio de permanencia, pero los museos del mundo aun conservan muchas figuras y utensilios de oro y de arcilla elaborados por aquellos artistas inimitables. Siglos más tarde llegaron a Tumaco los invasores españoles. Vinieron a buscar los tesoros que las leyendas indígenas mencionaban. Encontraron unos pequeños caseríos habitados por unos indígenas agricultores y pescadores, que también habían escuchado las mismas narraciones fantásticas. Decepcionados, los invasores se marcharon apresuradamente. Jamás imaginaron que navegando a contra corriente por los caudalosos ríos, podrían encontrar inmensas cantidades del metal dorado, que ambicionaban hasta el delirio. Años más tarde, millones de mujeres y hombres africanos fueron arrancados de sus aldeas y transportados a América. Fueron traídos como esclavos a trabajar en los cultivos, ganaderías y minas que los españoles explotaban. Pero muchos de estos hombres y mujeres procedentes de África se fugaron de las propiedades de sus amos y formaron los palenques, que eran territorios donde podían vivir en libertad. Otros trabajaron arduamente para comprar su libertad, o se beneficiaron con la ley que abolió la esclavitud, pero nunca pudieron volver a su tierra natal. Para vivir en América, los africanos y sus descendientes eligieron las tierras ardientes de las riberas de los ríos o las orillas del mar. Muchos de ellos prefirieron los ríos, los manglares y las tierras de la costa pacífica. De ese modo llegaron los negros a Tumaco. En los últimos tiempos, muchas gentes provenientes de todas las regiones del país han llegado a Tumaco. Junto con los negros, mulatos, indios y mestizos han conformado una población multirracial que trabaja arduamente para construir un futuro mejor para todos. Helmer Hernández Rosales

BREVE RESEÑA HISTÓRICA DE TUMACO El padre José Miguel Garrido antropólogo apela a los manuscritos del padre Andrés Duralde, sacerdote carmelita, entre los cuales se encuentra una carta del padre Ruggy que se refiriere a Tumaco. "Yo la fundé en el sitio que hoy está, ayudándome también los soldados. Traje a ella 1.900 almas, las saqué de los montes, catequicé y bauticé, con riesgo de la *Los nombres y sitios ha sido cambiados por vida, con trabajo y pobreza". Dice el seguridad de los declarantes padre Garrido que el padre Ruggy montó un astillero para los barcos que venían de Panamá y de otras partes, sin Testimonio 3: desconocer que inicialmente el municipio de Tumaco estuvo habitado “El problema que sucedió, y fue un pánico para nosotros, por indígenas. Las cerámicas, que se fue el caso de la fumiga (lee fumigación) ...muchas encontraron en la isla de El Morro y personas cuando escucharon por primera vez que venían también en Monte Alto, Inguapí y otros, las avionetas y los helicópteros comenzaron a correr a son testimonio de nuestros aborígenes y esconderse pensando que venían a agredirlos, a signo de su cultura. Se sabe que muchas bombardear los caseríos...” de ellas han encontrado un destino más (*Pedro Luis - Testimonio ante una fumigación en lejano, hallándose en los principales su parcela) museos tanto en América como de Europa o formando parte de galerías privadas. Su arte expresan con el material donde vivieron, la arcilla; con ella plasmaron el mundo que les rodeaba con gran realismo y fuerza diciendo en el barro toda la grandeza y miseria del hombre. La cerámica de Tumaco aunque menuda es quizá la más expresiva entre la cultura precolombina que se conoce, en contraposición a la estatuaria de San Agustín. La cerámica de Tumaco posiblemente fue el más rico yacimiento arqueológico que se encuentra en Colombia. Se funda en la permanente abundancia que hubo de éstas figuras o estatuillas ya hoy bastante explotadas. El 30 de noviembre de 1995 al cumplir 355 años de su fundación el Alcalde municipal, mediante resolución No. 414, ordena que en adelante y para todos los efectos oficiales públicos y privados, el Municipio de Tumaco se le debe denominar San Andrés de Tumaco, como un acto de fe y afirmación en los valores de la cristiandad. En un principio fue Tumaco el caserío de los indios Tumacs, después un archipiélago conformado por las islas de El Morro, La Viciosa y La Florida. En las primeras décadas de 1900 gozó de mucha bonanza por el intercambio comercial de los productos agrícolas, la tagua, el caucho y el cacao, con los países de América y Europa siendo

un puerto marítimo de gran importancia. Hoy es una ciudad con más de 150.000 habitantes (según último censo). Un bello puerto en el litoral Pacífico, de exótica belleza por sus innumerables playas El Morro, San Juan y Bocagrande. Piedad Ayora de Quiñones

TUMATAI “LA TIERRA DEL HOMBRE BUENO” El desvelo histórico de generaciones cultas, ligadas a las del presente, logró por fin despejar la incógnita que existía en torno de la fundación de Tumaco, pueblo sui géneris y de frecuentes controversias. Resultaba imposible que una población como Tumaco, que por su posición geográfica invita a la estrategia a detenerse, avanzara con el tiempo ignorando su orgullosa procedencia. El primer nombre que recibió Tumaco, confirmó la calidad humana de las gentes a partir de sus ancestros. Antes del descubrimiento de la América, entre las diferentes clases de aborígenes que se establecieron en nuestro continente, del Perú llegó hasta nuestra costa (lo que hoy comprende el Litoral Pacífico nariñense), una tribu que se denominó "Tumapaes", que en su dialecto traducía: "Tierra de abejas", descendientes de los indios "Caras", los que se diseminaron entre Tumaco y ríos aledaños, avanzando hasta el Patía, al que llamaron río Sucio. A esta tribu se le atribuye la fundación de nuestra región, dándole a Tumaco el nombre de "Tumatai", que significa "Tierra del hombre bueno". Los indios "Tumapaes", cuya cultura superó a la de los "Cayapas", establecidos en lo que es hoy la provincia de Esmeraldas (Ecuador), por organización social imponían lo que ellos llamaban el "curi caricao", que significaba "la gran parcela de todos", tuvieron como primer cacique al indio "Tumaipaita", quien los guió por sistemas del bien, distanciados del sometimiento. Tribu esencialmente pacífica, amistosa y laboriosa, se dedicó a diferentes actividades específicas de su cultura, la pesca, la agricultura, la extracción del oro de los ríos de la región y la orfebrería. Su dialecto fue el "tumas" que contaba con un alfabeto flexible de cambio fonético. Mientras el alfabeto era rico, la fonética no lo era, por eso pocos blancos lo hablaron, los negros ninguno.

Los "Tumapaes", adoraban al sol, la luna, al mar y a un ser superior no materializado. El pueblo aparece por primera vez con el nombre de Tumaco, que significa "Tierra de entierros", debido a que un grupo de indios de la tribu "Tumapaes" encontró muchas vasijas de barro a la orilla del mar, los que creyeron que se trataba de un regalo del más allá, entonces el cacique "Tumatinga" (Tierra del amor sol), le cambió el nombre de "Tumatai", por el de Tumaco. (Helena Jiménez Sicard de Lozano)

CONTEXTO GEOGRAFICO Y DEMOGRÁFICO Tumaco, es el segundo puerto colombiano en el Pacífico por importancia, después de Buenaventura, y dista de Pasto, la capital del Departamento de Nariño, unos 300 kms por vía pavimentada. Posee una población de 162.604 habitantes (9,5% del total del departamento) y una extensión de 3.778 km2 (11,7% del total del departamento), convirtiéndose en la segunda población por número de habitantes después de la capital Pasto y el primer municipio por extensión geográfica. La mayoría de los habitantes (95% aproximadamente) son afrodescendientes. Existen 9 Consejos Comunitarios y 12 resguardos indígenas en su territorio. La principal vía de transporte es la fluvial y la marítima, ya que tan solo dos municipios poseen carretera.

Tumaco, es la sede del obispado del mismo nombre, el *Los nombres y sitios ha sido cambiados por seguridad de los declarantes cual comprende 9 de los 10 municipios de la costa pacífica nariñense. La Diócesis de Tumaco tiene una extensión de Testimonio 4: 15.552 km2 (48 % de la extensión del Departamento) y “Se formó una balacera inesperada en el (*sitio reservado). La gente corría buscando refugio para ampararse de las balas. Las una población de 295.818 (17% balas pasaban de lado a lado del río. Las casas quedaban en mal del total del Departamento). La estado, hubo muchos que nos desplazamos por lo cual la vereda se Diócesis se divide en 17 quedó sola...” parroquia dentro de los 9 municipios: Tumaco, (*Doña Custodia – Vereda El Sagrario) Barbacoas, El Charco, Francisco Pizarro, Magüí. Olaya Herrera, Roberto Payán, Mosquera, La Tola. Iscuandé pertenece al Vicariato Apostólico de Guapi. Su clima es ardiente húmedo en todo el territorio y con fuertes precipitaciones de lluvia. Los ríos principales son: Patía, Telembí, Magüí, Tapaje, Iscuande, Satinga, Sanguainga, Curay, Chagüí, Mejicano, Gualajo, Rosario, Caunapí, Mira y Mataje, navegables todos ellos en gran parte de su extensión y constituyen la principal vía de comunicación. El municipio de Tumaco y el área vecina posee una flora sumamente rica, siendo catalogada la cuenca del Pacífico como una de las regiones más ricas en biodiversidad. Es una región maderera. Posee una gran variedad de fauna y se trabaja en la explotación minera de la región, siendo el oro el renglón tradicional de la economía, el cual en la actualidad es explotado por empresas mineras ajenas a la región. Alarmante situación de la infraestructura Los índices de infraestructura en el municipio de Tumaco señalan que • • •

el 77,41 % de la población no tiene atención en servicios básicos; el 31,12% accede al servicio de acueducto y en muy malas condiciones; tan solo el 4,42 % tiene servicio de alcantarillado.

Los niveles de pobreza en el municipio se manifiestan en que • •

el 55,02% están por debajo del índice de NBI (Necesidades Básicas Insatisfechas) y el 27% viven en condiciones de miseria absoluta.

Esto, aunado al grave grado de corrupción administrativa que ha vivido en los últimos años, a la aparición de los cultivos de uso ilícito y por ende al recrudecimiento del conflicto y al gran número de desplazados en el casco urbano (5% del total de la población aproximadamente), hacen que sea necesario la intervención del gobierno nacional t gubernamental y también de la Comunidad Internacional con políticas serias y soluciones viables para que esta comunidad pueda salir adelante. (Ver mapa ubicación de la diócesis y ubicación del municipio).

PROBLEMÁTICA La región del Pacífico Colombiano se ha caracterizado por el abandono estatal, esto sumado a que la región se ha identificado como reserva o despensa para ir a extraer los recursos naturales y luego salir sin dejar ninguna inversión o fortalecimiento de capacidades locales.

*Los nombres y sitios ha sido cambiados por seguridad de los declarantes

Testimonio 5: “En la comunidad de *La Chorrera Verde empezaron el enfrentamiento más arriba, pero las balas caían al techo de las casas y al río; las personas corrían a las montañas a como diera lugar buscando donde refugiarse. Luego del combate regresaron frente de la casa de doña Eugenia refugiándose en esa casa por ocho días, bajando las colchonetas y las cobijas, los toldillos al patio, dejándonos todo perdido. Cuando se fue el grupo armado, todos los civiles regresaron a sus casas. Lo único que no hubo fue muerte de los civiles”.

En la última década la región ha entrado a formar parte del escenario del conflicto armado. De manera particular desde 1996 éste se ha agudizado a tal punto que cobra importancia (*Calixto – Desplazado por combates y amenazas) por los altos niveles de crisis humanitaria, representada en los continuos y masivos desplazamientos entre municipios, entre departamentos, hacia fuera de la región y dentro de los territorios étnicos.

Durante los cinco últimos años, se pueden estimar en 2.000 las personas muertas por causas relacionadas con el conflicto, y un numero igual de familias desplazadas por la violencia. La gran mayoría de las víctimas fueron civiles, involucradas al conflicto de manera indirecta, como en el caso de los campesinos cocaleros. Otras fueron asesinadas por sus actividades delincuenciales en el desarrollo de las ilícitas campañas de ‘limpieza social’. Muchas otras víctimas no tuvieron otra razón por ser ejecutadas que la de vivir en un territorio en disputa entre los grupos armados al margen de la ley y la fuerza publica. En violación de las normas del Derecho Internacional Humanitario, han sido obligadas a prestar servicios o a entregar información a uno de los actores bélicos, exponiéndose directamente a la retaliación de la parte opuesta. Por fin, mencionamos las personas asesinadas, amenazadas o desplazadas que lo fueron por denunciar las atrocidades de la guerra civil, como es el caso de la Hermana Yolanda Cerón, directora de la Pastoral Social, asesinada a la salida de la oficina el 19 de septiembre de 2001 a manos de sicarios contratados por los “señores de la guerra”. Las estrategias de control social y territorial puestas a prueba por los actores armados ilegales han resultado en un clima de zozobra permanente. Cada cual se encuentra obligado a callar las injusticias que observa o padece por miedo a ser enlistado y eliminado. Los actores armados al margen de la ley parecen haber optado por usar el mecanismo del asesinato y la amenaza selectiva y colectiva como su mayor medio de comunicación y relacionamiento con la sociedad, manteniendo así una autoridad fundamentalmente ilegitima a los ojos de la población.

Los beneficios del conflicto para los “Señores de la Guerra” son, lo sabemos, inconmensurables. La Costa Pacifica Nariñense se ha convertido en un territorio de bonanza para los que no temen usar de la violencia. La guerra contra la población civil es total y en su estrategia incluye privarla de una parte substancial de los servicios de salud, de educación o de saneamiento básico a los cuales tiene derecho. Frente a esto se han podido adelantar acciones de carácter humanitario, para visitar lugares en donde se han presentado desplazamientos masivos. Esto ha sido posible gracias al apoyo mutuo entre la Pastoral Social, la Defensoría del Pueblo y el ACNUR. Entre los lugares atendidos en el último año están: •





Desplazamiento masivo en la vereda de Panga (municipio de Roberto Payán San José). En visita practicada por la Pastoral Social de la Diócesis el 13 y 14 de febrero del año 2004 se constató el desplazamiento forzado de 104 habitantes de la vereda de Panga (Municipio de Roberto Payán - San José) ocurrido a finales del mes de diciembre y principios de enero de 2004, hacia los cascos urbanos de los municipios de Barbacoas y San José; desplazamiento causado por amenazas de los grupos insurgentes los que han exigido la salida de sus habitantes por ser tachados de colaboradores de los grupos de Autodefensas. Emergencia humanitaria en las veredas Ricaurte, El Playón, Cerrito, Campo Alegre y El Piaunde (municipio de Magüí-Payán). En informe brindado por el párroco de Magüí, se pudo constatar que en la zona comprendida entre el Alto Telembí y el río Patía se presentan desde inicios del mes de abril (2004) enfrentamientos entre fuerzas de las FARC y fuerzas de las AUC en procura de dominar esa región, lo cual ha generado entre los habitantes de la zona una constante zozobra que los ha obligado a salir de sus viviendas y resguardarse en el casco urbano de Payán, municipio de Magüí. Esta cabecera municipal en primer lugar es muy pequeña y su infraestructura de atención (puesto de salud, viviendas, etc) es muy reducida, lo cual ha traído un segundo fenómeno: el hacinamiento de personas en la escuela y el éxodo de los pobladores al municipio vecino de Barbacoas, según lo constatamos con el párroco de la población y Vicario de la Zona Occidente de la Diócesis. El número de familias desplazadas registradas en la personería de Magüí fueron 62 por un total de 302 personas y las familias que de manera esporádica se desplazaron a Barbacoas fueron aproximadamente 30. Combates y desplazamiento masivo en las veredas Banguela y Guayaquil (municipio de El Charco). El 24 de abril de 2004 se presentaron combates entre un grupo de las FARC y otro de los grupos de las AUC, quedando los civiles en medio del fuego cruzado. Ante el temor de nuevos enfrentamientos la población se vio forzada a desplazarse a la cabecera municipal. Muchos, según constatamos en visita de enero 25

de 2005, aún no han regresado a su lugar de origen por falta de garantías para proteger sus vidas y sus bienes.

CARACTERIZACION DE LA POBLACIÓN DESPLAZADA 1. PROCESO DE RECOLECCIÓN DE INFORMACIÓN

La Pastoral Social de Tumaco, a través de su área de Vida, Justicia y Paz ha venido atendiendo, en la medida de sus posibilidades y recursos, a la población en situación de desplazamiento forzado hace tres años aproximadamente, cuando el fenómeno del desplazamiento comenzó a convertirse en una emergencia social en el casco urbano del municipio de Tumaco. La atención se comenzó a brindar a través de recursos propios de la Diócesis y pequeños proyectos que la Pastoral gestionó ante entidades nacionales e internacionales. Pero, a medida que se atendía, el fenómeno crecía de manera aritmética hasta convertirse en un hecho que en la actualidad desborda las posibilidades de atención no solo de la Iglesia local sino del mismo Estado a través de la Red de Solidaridad Social. Con el apoyo de la sección de Movilidad Humana de la regional Sur Occidente, la Pastoral Social de Tumaco observó la necesidad de hacer visible el fenómeno del desplazamiento en Tumaco y en la Costa Pacífica Nariñense a través del levantamiento de un censo más amplio de la población desplazada asentada en el casco urbano del mayor municipio receptor y expulsor a la vez de la costa pacífica nariñense como lo es Tumaco. Este censo buscaba ubicar al mayor número de población desplazada, con parámetros de confiabilidad, veracidad y un espíritu evangélico de “ayudar a los más necesitados a ser protagonistas de su destino”, ya que la

mayoría de la población desconocía sus derechos básicos como desplazados, tenían temor y desconfianza de declarar ante los organismos del Estado (Red de Solidaridad, Personería), eran rechazadas sus declaraciones por los mismos organismos o, en muchos casos, tenían miedo a ser reconocidos como desplazados ante la presencia de miembros de las fuerzas causantes del desplazamiento en el mismo casco urbano.

Testimonio 6: “En la vereda de *El Choclo, cuando existieron los combates se formaron retenes y las FARC no dejaban pasar a nadie; un niño que estaba enfermo no lo hicieron pasar y el niño falleció porque no pudo ir al hospital de El Charco” (*Federico – Desplazado de El Charco)

El Censo se adelantó a través del uso de la ficha del “Sistema RUT” que el SNPS ha venido impulsando en todo Colombia como un medio alternativo, eficaz y confiable de información, con el apoyo de Movilidad Humana de la regional Sur Occidente y la participación de Movimondo como entidad aportante. 1.1. METODOLOGÍA DEL CENSO

El sistema del Censo se realizó a través de la capacitación de 44 entrevistadores. Las entrevistas se realizaron puerta a puerta, a través del conocimiento de los barrios y sectores del casco urbano del municipio de Tumaco, la consulta a vecinos y la confrontación de datos para ubicar, entrevistar y censar a la población en situación de desplazamiento. Para adelantar el censo se dividió el casco urbano en siete zonas, cada una con un coordinador zonal y un número de entrevistadores de acuerdo al estimativo de población desplazada en cada barrio, según la información brindada por las asociaciones de desplazados formalmente conformadas. Las zonas que se ubicaron fueron las siguientes: No. ZONA

BARRIOS

Número de Entrevistadores

El Bajito -Brisas del aeropuerto – El libertador – 6 Modelo – Morrito - La Florida 2 EL PINDO El Pindo -Viento Libre - Panamá 6 3 NUEVO MILENIO Nuevo Milenio - Exportadora – Bello Horizonte5 11 DE 11 Noviembre - Iberia – Los Ángeles 4 6 NOVIEMBRE California UNIÓN 5 Unión Victoria -El Obrero 6 VICTORIA Candamo - El Porvenir – El Jardín – 6 CANDAMO 9 Nuevo Horizonte – Ciudad 2000 - Ciudadela 7 CENTRO Centro - Los Puentes 6 TOTAL ENTREVISTADORES 44 1

EL BAJITO

En cada zona el Coordinador zonal recibía un informe diario de las entrevistas adelantadas por el encargado (a), quien debía entregar al menos 5 entrevistas bien diligenciadas por día. El Coordinador entregaba informe semanal de su zona al Coordinador general o en su defecto a la Asistente encargada de sistematizar la información recibida. Con esto se pretendía bajar el porcentaje de entrevistas RUT mal diligenciadas, dudosas o no correspondientes a población desplazada y aumentar el grado de veracidad del proceso de recolección.

1.2. CAPACITACIÓN Se adelantaron dos talleres de capacitación para entrevistadores de población desplazada a través del Sistema RUT de la sección de Movilidad Humana de la Pastoral Social Nacional. El primer taller de capacitación asistieron 55 personas. Se realizó el 17 de julio y estuvo a cargo de la delegada para Movilidad Humana de la Regional Sur Occidente, señora Gloria Risueño. Este primer taller consistió en conocer la realidad de la problemática del desplazamiento y la configuración de un censo poblacional para hacer visible el fenómeno del desplazamiento en Tumaco, tanto en el casco urbano como en el sector rural. Se explicó la legislación que regula la atención por parte del Estado hacia la población en situación de desplazamiento contemplada en la Ley 387. Para terminar se explicaron los términos del trabajo de voluntariado, las normas para adelantar el Censo del Sistema RUT, el número de encuestas previstas a realizar y el sistema de control de dichas encuestas. El segundo taller de capacitación se adelantó el día 31 de julio con la participación de los 44 entrevistadores ya seleccionados. Se realizó la división de las zonas y el diligenciamiento de la encuesta RUT a través de un simulacro de entrevista entre los mismos participantes. Se volvió a hacer énfasis de la importancia del trabajo a realizar y de la confiabilidad de los datos que se deberían obtener. 1.3. RESULTADOS CENSO Se adelantó el censo durante los quince días previsto, o sea del 1 al 15 de agosto del presente año en las siete zonas anteriormente detalladas.

El trabajo del censo se evaluó en días posteriores y en forma inmediata se comenzó el trabajo de digitación de las fichas diligenciadas, a la vez que en las Oficinas de Pastoral Social se continuó atendiendo nuevas declaraciones. Los resultados del censo fueron los siguientes, de acuerdo a la evaluación realizada por los mismos entrevistadores y coordinadores zonales: 1.

Los entrevistadores:

Se observó cumplimiento, responsabilidad y trabajo en equipo. Respeto hacia la población a entrevistar y conciencia de la realidad del desplazamiento. Por mejorar la organización de los mismos grupos para atender a los barrios, no abarcar sitios no asignados. 2.

Los coordinadores:

Se observó responsabilidad en el trabajo y la asesoría y vigilancia de las labores de sus compañeros asignados para la zona. Puntualidad en la entrega de los informes semanales.

3.

El trabajo de campo:

Existió buena acogida por parte de la población en situación de desplazamiento. El formulario en líneas generales fue fácil de manejar y abarcaba los tópicos necesarios para hacer el trabajo de visibilización. De igual forma el trabajo en rejillas ( entrevistador, coordinador zonal, asistente y coordinación general) posibilitó la confiabilidad del trabajo adelantado. Por mejorar ésta en algunos entrevistadores que a veces se confundieron en el manejo de los códigos y fue necesario revisar y corregir algunas entrevistas. 4.

La población:

Los desplazados acogieron el trabajo realizado y ayudaron a ubicar otras familias que no se encontraban inscritos ni en la Red de Solidaridad ni en ningún otro programa de atención. También se presentó confianza frente al trabajo adelantado por la Iglesia y ofrecieron buena información en cuanto a la situación de desplazamiento.

*Los nombres y sitios ha sido cambiados por seguridad de los declarantes

Testimonio 7: “Todo pasó porque mi marido les vendió un cerdo que teníamos en la huerta a uno de los grupos que andan por aquí; él no les ayudó, ellos le dijeron que se lo llevaban y que por eso le pagaban... a los meses llegaron los contrarios y nos acusaron de ser colaboradores de la guerrilla... nunca tuvimos nada que ver con ellos, ellos solo pasan por aquí por que es camino de andar para todos, pero no nos creyeron y a él lo pusieron afuera de la casa y a nosotros nos dejaron adentro... Después de la muerte de mi marido decidí irme por temor a que también me mataran... y aquí estoy en Tumaco, pero no quiero regresar por allá... Vea, eso es muy peligroso para uno...”

Por mejorar es que aunque no (*Doña Eulalia – Habitante de uno de los barrios con mayor ha sido la intención el trabajo población desplazada en Tumaco) generar muchas expectativas de ayuda en la población entrevistada, de igual manera hay personas que por su situación de pobreza pretenden ser censadas como si fueran desplazadas. En algunos casos la información no era muy concreta, a veces por miedo o por falta de recordar algunos datos. 5.

Los resultados:

Según la apreciación de los entrevistadores y los coordinadores zonales, se abarcó un 90 % del total de los barrios y sectores en donde se encuentra la mayor cantidad de población desplazada. De las 2.000 encuestas estimadas se alcanzaron a realizar 1879, para una cobertura del 94 %.

Entrevistas previstas a realizar Total entrevistas realizadas Total entrevistas satisfactorias Total entrevistas dudosas Total población posiblemente cubierta

TOTAL 2.000 1.879 1.759 120

% 100.0 100.0 93.6 6.4 90.0

Las entrevistas que se estimaron como dudosas, 120 en total, se ubicaron así por inconsistencias en la declaración, posibles dudas del declarante o errores en el momento de elaborar la encuesta. Estos resultados fueron sometidos a una segunda contra-muestra (5% del total de las encuestas) para determinar la veracidad de las entrevistas estimadas como positivas y descartar las que se habían considerado como dudosas. Para ello trabajaron dos personas ajenas al trabajo del Censo, quienes al azar tomaron 30 entrevistas positivas y 30 dudosas con el siguiente resultado:





- De las 30 entrevistas positivas: En 27 se reconfirmaron los datos; 3 no se encontraron las personas en la casa de habitación, lo cual puede indicar que las personas se volvieron a reubicar por su constante movilidad. - De las 30 entrevistas dudosas: 25 se declararon como nulas por inconsistencia en los datos, familias que no correspondían a situación de desplazamiento forzado o imposibilidad de encontrar a la familia declarante. Las 5 restantes se encontraban inscritas en el Sistema Único de Registro (SUR) de la Red de Solidaridad

Este contra-muestreo brindó una mayor veracidad al trabajo adelantado por los entrevistadores y coordinadores, ratificando el proceso de recolección de información y el grado de confiabilidad del Censo. 1.4. VISIBILIZACION DE LOS RESULTADOS A nivel local y regional los resultados obtenidos al 31 de octubre se publicarán en un informe estadístico que será entregado a las partes del convenio para su estudio y la aplicación en políticas de atención. De igual manera se ha socializado la información y datos obtenidos con las distintas entidades gubernamentales y de carácter privado que tiene incidencia en la zona, lo mismo que con las jurisdicciones eclesiásticas que trabajan en el proceso de Pastoral Fronteriza (Tumaco, Ipiales, Puerto Leguízamo y Mocoa-Sibundoy por Colombia; Esmeraldas, Tulcán, Ibarra y Sucumbíos por el Ecuador) y que viven el fenómeno del desplazamiento y de refugiados colombianos en el Ecuador por causa del conflicto armado en Colombia. Al mismo tiempo, salvaguardanto la estricta confidencialidad de los datos, se está tratando de hacer un cruce de información con la Red de Solidaridad Social en cuanto a al número de inscritos en el Sistema Único de Registro (SUR) y buscar hacer un mejor trabajo de atención con las personas que acudan a las instituciones en busca de ayuda o atención.

2. ANÁLISIS DE LOS DATOS OBTENIDOS 2.1. COMUNIDAD DESPLAZADA SEGÚN AÑOS DE RECEPCION El desplazamiento forzado en la Costa Pacífica Nariñense es un fenómeno reciente en comparación con la antigüedad del conflicto armado colombiano: data de mediados de los años 90 y va de la mano del comienzo del cultivo de productos de uso ilícito y de la consabida presencia de los actores armados (FARC, ELN y AUC) en la formación de ese terrible triangulo de dolor: Narcotráfico-Conflicto-Desplazamiento. A pesar de no llevar más de diez años en la región, el fenómeno ha cobrado dimensiones inconmensurables en su número de víctimas y en las situaciones dolorosas que las comunidades han vivido. El conflicto ha recrudecido en los años del 2001 al 2003, en donde se ha presentado el mayor índice de muertes violentas, incremento de la siembra de coca y por ende mayor número de desplazamientos, lo cual ha llevado al punto de convertir esta región en una zona de alta problemática social por causa del conflicto, de los niveles de pobreza y de abandono estatal, que subsisten de años atrás. (Ver cuadro 1)

CUADRO 1 - DESPLAZAMIENTO POR AÑOS Y GENERO Jefatura Personas 1997 y 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 Familiar según anteriores

Sexo TOTAL DE LA MUESTRA: HOMBRES MUJERES

1.759

8.076

187

94

300 468 1.171 1.806 2.426 1.624

817 942

3.908 4.168

87 100

50 44

152 215 580 148 253 591

873 933

1.176 775 1.250 849

2.2. COMUNIDADES EXPULSORAS Tumaco, uno de los municipios más extensos de Colombia (3.778 km2), es el mayor expulsor de población desplazada en Nariño y a la vez el mayor receptor por su extensión, haciendo que se presente el fenómeno de desplazamiento intramunicipal de las veredas y corregimientos hacia la cabecera municipal. El desplazamiento forzado, que sucede en Tumaco, es un problema que no solo abarca el conflicto armado y el narcotráfico, que hace que personas de municipios cercanos a Tumaco de desplacen hacia la principal población de esta región pacífica. También se puede observar que personas de otras regiones del país, incluso muy lejanas, que han sido afectadas por el desplazamiento vean en Tumaco una “nueva oportunidad de vivir”, un extraño “paraíso perdido” en una isla en el Pacifico convertido en una posible salvación económica gracias a la falsa pujanza cocalera. Un aspecto sumamente preocupante del desplazamiento que acontece en el municipio es que involucra a las comunidades afrodescendientes, teniedo graves implicaciones para ellas, en cuanto que durante tantos años han luchado por sus derechos al territorio y a la propiedad colectiva, hasta conseguir el reconocimiento de la tenencia de la tierra que se ha ido consolidando en la Ley 70 de comunidades negras. Con el desplazamiento las comunidades se ven debilitadas al interior de las mismas, los Consejos Comunitarios pierden su capacidad de engranar proceso de autodeterminación, de empoderamiento y sobre todo procesos culturales en busca de su identificación como etnia, de su costumbres y creencias propias. Lo mismo acontece en las zonas donde existe presencia de resguardos indígenas, a los cuales el desarraigo los lleva a ser invisibilizados en las sociedades que los absorben. (Ver cuadro 2 y 3) CUADRO 2 - POBLACIÓN DESPLAZADA SEGÚN COMUNIDADES EXPULSORAS POR DEPARTAMENTO Departamento Expulsor NARIÑO PUTUMAYO VALLE CAUCA ANTIOQUIA CHOCO OTROS TOTAL

FAMILIAS %

PERSONAS %

HOMBRES %

MUJERES %

1.547 80 57 18 12 9 36 1.759

7.122 375 260 80 54 39 146 8.076

3.439 178 133 43 26 17 72 3.908

3.683 197 127 37 28 22 74 4.168

87,95 4,55 3,24 1,02 0,68 0,51 2,05 100

88,19 4,64 3,22 0,99 0,67 0,48 1,81 100

88,0 4,6 3,4 1,1 0,7 0,4 1,8 100

88,4 4,7 3,0 0,9 0,7 0,5 1,8 100

CUADRO 3 - POBLACIÓN DESPLAZADA EN TUMACO SEGÚN COMUNIDADES EXPULSORAS DE NARIÑO Municipio FAMILIAS Expulsor TUMACO 1.187 BARBACOAS 203 FCO. PIZARRO 47 EL CHARCO 32 MAGUI22 PAYAN MOSQUERA 11 ARBOLEDA 10 LA TOLA 5 ROBERTO 5 PAYAN Otros 25 Municipios Total Nariño 1.547 Total Muestra 1.759

%

PERSONAS %

HOMBRES %

MUJERES

%

67,48 11,54 2,67 1,82

5.434 949 231 176

67,29 11,75 2,86 2,18

2.637 435 114 93

67,48 11,13 2,92 2,38

2.797 514 117 83

67,11 12,33 2,81 1,99

1,25

111

1,37

57

1,46

54

1,30

0,63 0,57 0,28

50 44 26

0,62 0,54 0,32

25 19 12

0,64 0,49 0,31

25 35 14

0,60 0,84 0,34

0,28

24

0,30

8

0,20

16

0,38

1,42

77

0,95

39

1,00

38

0,91

87,95 7.122 100,00 8.076

88,19 3.439 100,00 3.908

88,00 3.693 100,00 4.168

88,60 100,00

2.3. EXTENSIÓN DE TIERRA ABANDONADA Uno de los graves problemas del conflicto armado que se asocia al desplazamiento es el abandono de la tierra por parte de las familias; tierra que luego es ocupada por los actores armados para ser utilizada como asentamiento de los grupos, lugares para el cultivo de coca o que simplemente pasan a engrosar la propiedad de nuevos “terratenientes”. De igual manera el desarraigo trae consigo la pérdida de la memoria colectiva de las comunidades afrodescendientes, de su espacio vital de convivencia y realización, de la posibilidad de construcción de una historia conjunta que ayude a muchos pueblos de la Costa Pacífica a salir de su atraso. Según el censo, el total de la tierra abandonada es de 19.010 hectáreas, destacando que la mayoría (59,25%) tenía propietario y el 22,33% de personas no precisan de manera clara el tipo de uso de la misma. Es de tener en cuenta que esto puede acontecer por que en las zonas de expulsión se presenta el proceso de titulación colectiva de la tierra, lo cual hace que muchas familias desplazadas se consideren propietarias de la misma o no sepan aún con claridad el tipo de posesión que tienen sobre los predios que cultivaban. (Ver Gráfico 1)

GRAFICO 1 - EXTENSION DE TIERRA ABANDONADA

2.4. COMPOSICIÓN FAMILIAR POR EDAD Y SEXO Del total de la muestra, las 8.076 personas se agrupan en 1.759 familias, con un promedio de 4,6 personas por núcleo familiar, en donde la jefatura familiar prima en la mujer con 942 familias (53,6%) en comparación a 817 (46,4%) en donde es el hombre quien lleva la responsabilidad del hogar. Esto responde a la dinámica misma del conflicto en donde la mayoría de las víctimas siguen siendo los hombres o como viene aconteciendo en Colombia, las mujeres están asumiendo la responsabilidad del hogar ante la ausencia del hombre (por muerte, abandono, desplazamiento, etc) o por falta de empleo o responsabilidad del cónyuge. De esto se puede apreciar que de los 942 hogares regentados por mujeres, en 665 hay presencia de la figura conyugal masculina, pero la responsabilidad del hogar recae sobre la mujer. En la muestra, se puede apreciar que las personas que sufren mayor desplazamiento son quienes están en un rango de edad entre los 18 a 45 años, 16% de los hombres y 20% de las mujeres, lo cual reconfirma la muerte selectiva de hombres adultos. De esto da fe que 186 personas declararon ser viudos o vuidad: 28 hombres y 158 mujeres. Además podemos apreciar que la mano de obra se ve ampliamente afectada, lo cual trae consigo altos índices de desempleo en la población desplazada, desequilibrio económico, niños y jóvenes buscando trabajo para mantener sus hogares y por ende alta deserción escolar. Sigue como grupo humano altamente impactado el de los niños entre los 7 a los 13 años con un 23,5% del total de la población afectada. Está claro que, si se suman los rangos entre los menores de 1 año y los menores de14 años, verificamos que el 43,8% del total de la muestra son niños. Esto nos muestra que el conflicto en esta zona afecta sobremanera a la población infantil, convirtiéndose en el grupo humano más vulnerable y afectado por falta de atención en salud, educación, alimentación, entre otros, sin contar la parte afectiva por la carencia de la figura paterna en el hogar. En cuanto a género, siguen siendo las mujeres la población más afectada a causa del desplazamiento: 51,6% frente a un 48,4 % de la población masculina. (Ver Cuadro 4)

CUADRO 4 - COMPOSICIÓN FAMILIAR POR EDAD Y SEXO Población > de 2 3a6 7 a 13 14 a 17 < de 18 18 a 45 46 a 64 65 y más NS/NR > de 18 Total %

Total 623 1.013 1.901 850 4.387 2.888 558 222 21 3.689 8.076 100,00

Hombres 321 542 977 426 2.266 1.294 225 108 15 1.642 3.908 48,39

Mujeres 302 471 924 424 2.121 1.594 333 114 6 2.047 4.168 51,61

% 7,71 12,54 23,54 10,53 54,32 35,76 6,91 2,75 0,26 45,68 100,00

La composición de cada familia se puede discriminar de la siguiente forma: el 53,3% de los hogares están constituidos por padre, madre e hijos y en un 46,7% hay ausencia de uno de los cónyuges. Esto indica que a pesar del desplazamiento y las consecuencias que consigo trae el fenómeno, la población de la Costa Pacífica sigue procurando mantener la unidad familiar, ya que para la comunidad afrodescendiente el núcleo familiar (padres, hijos, tíos, nietos, primos, etc) tiene una importancia primordial en el modo de vida y de relación interpersonal. (Ver Cuadro 5) CUADRO 5 - COMPOSICIÓN POR ROL FAMILIAR Personas Jefatura Jefe según Familiar (a) Sexo TOTAL DE LA MUESTRA:

1.759

8.076

HOMBRES

817

3.908

MUJERES

942

4.168

1.759 817 942

Padres Hijo Nieto Hermanos Otros Otros no Cónyuge Yerno/Nuera o (a) (a) (as) Parientes Parientes Suegros 938 273 665

4.645 2.452 2.193

18 7 11

372 194 178

48

35

134

127

14

22

60

69

34

13

74

58

2.5. PRINCIPALES NECESIDADES DE LA POBLACIÓN En este punto hay que tener en cuenta un nuevo aspecto que se suma al problema del desplazamiento y es que la comunidad receptora de las familias. En el caso de Tumaco el casco urbano tiene igual número de necesidades en salud, empleo, vivienda, servicios públicos y demás en poco o en nada satisfechas por las autoridades locales, lo cual hace que el impacto de las familias desplazadas sobre la población receptora sea aún más dramático y de difícil atención, ya que no solo se deben implementar programas de atención a la población desplazada sino que también se debe atender a la comunidad receptora. Por eso es fácil encontrar familias nativas de la población que, dada su difícil situación económica, opten por hacerse registrar como desplazadas ante la Red de Solidaridad Social, la Pastoral Social u otras entidades, lo cual dificulta sobremanera la identificación veraz y la pronta atención. En cuanto a las necesidades básicas, que la población desplazada requiere, destaca como primera instancia la alimentación (86,3%), luego vienen el trabajo (77,1%), el alojamiento (74,3%), la educación (68,2%) y la atención en salud (63,8%). En cuanto a las ayudas que han recibido el mayor rubro ha sido en alimentación (30,4%), salud (13,4%) y elementos de aseo

(9,1%). Se aprecia que la necesidad de trabajo ha sido poco atendida (tan solo en un 1,3%) y que más del 60% de la población no ha recibido ayuda de alguna institución. (Ver Cuadro 6) En cuanto a consecución de documentos se observa que un 68,2% requieren documentos y sólo se ha podio atender a un 1,2%. Cabe indicar que del total de la muestra poblacional 1311 personas declararon no tener ningún tipo de documentación (16,2%). CUADRO 6 PRINCIPALES NECESIDADES DEL GRUPO FAMILIAR RECIBIDA

REQUERIDA

TIPO DE AYUDA Alimentación Menaje de cocina Elementos de aseo Alojamiento Medicinas Vestuario Camas Colchonetas Dinero Transporte Atención en Salud Apoyo Psicosocial Asesoría Jurídica Trabajo Educación Consecución de documentos Otros Ninguno NS/NR

(% Total población)(% Total Población) 30,4 86,3 5,3 58,7 9,1 58,5 7,3 74,3 5,9 57,2 1,2 51,4 0,7 63,1 2,7 62,8 0,7 51,8 0,2 48,9 13,4 63,8 1,5 21,9 0,1 36,3 1,3 77,1 6,1 68,2 1,2 20,3 0,5 1,3 60,6 0,4

2.6. DESEO DE UBICACIÓN DE LA POBLACIÓN DESPLAZADA A pesar de que las condiciones socioeconómicas de la gran mayoría de la población desplazada son precarias, rayando en situaciones de total hambruna y miseria, y que el lugar donde han sido recibidos no les brinda la misma estabilidad que el lugar de donde fueron expulsados, ellos no desean retornar. Es claro que el impacto que causó el desplazamiento infunde temor y angustia, al igual que las condiciones para preservar la vida son muy pocas, por lo cual prefieren “morir de hambre” en su nuevo asentamiento a vivir en la zozobra en su propia tierra. (Ver Gráfico 2)

GRÁFICO 2 - DESEO DE UBICACIÓN DE LA POBLACIÓN DESPLAZADA

2.7. ACTORES Y MOTIVOS CAUSANTES DEL DESPLAZAMIENTO La información recolectada en la muestra indica que los actores armados responsables del desplazamiento son en su gran mayoría los grupos guerrilleros, seguidos por los grupos paramilitares. Pero resulta claro que en muchas ocasiones los declarantes, por temor a quien esté operando en el casco urbano donde se reubican, no quieren identificar o modifican y hasta omiten el nombre específico de los causantes reales de su desplazamiento. Esto se ratifica con los motivos que causan tal desplazamiento, siendo la amenaza el mayor item de desplazamiento, seguido por el miedo y el asesinato. Menor motivo ha sido el combate, lo cual indica una sistemática forma de terror que procura sacar a la población campesina de sitios estratégicos en la zona. (Ver Gráficos 3 y 4) GRÁFICO 3 - ACTORES CAUSANTES DEL DESPLAZAMIENTO

GRÁFICO 4 - MOTIVOS CAUSANTES DEL DESPLAZAMIENTO

2.8. PERTENENCIA A ORGANIZACIONES SOCIALES Si uno de los motivos de desplazamiento es la ubicación estratégica de los grupos en combate, esto va de la mano con la caracterización social de las personas, las cuales declaran en un 18,7% haber pertenecido a organizaciones de carácter campesino y en un 5% a organizaciones de carácter comunitario, en estos casos a algún tipo de vinculación con los Consejos Comunitarios que existen en la Costa Pacífica. (Ver Cuadro 7) CUADRO 7 - ORGANIZACIONES SOCIALES Organización Campesinas Comunitarias Sindicales De Mujeres Otras

% 18,7% 5,0% 0,1% 0,7% 1,6%

2.9 PERTENENCIA A MINORIAS ÉTNICAS De acuerdo al índice poblacional de la región, es evidente que la mayoría de la población desplazada afrodescendiente busque su ubicación en un municipio en donde sus tradiciones culturales, de orden económico y climático sean similares al sitio de expulsión. En cambio, comunidades como las indígenas buscan su asentamiento en otras poblaciones como Pasto, la capital del departamento, y no en Tumaco. (Ver Cuadro 8) CUADRO 8 - MINORIAS ETNICAS

Comunidades afrocolombianas Comunidades indígenas Otras Total

% Población 71.4% 5.769 2.5% 204 26% 2.103 100% 8.076

2.10. ENFERMEDADES PRESENTADAS DURANTE EL DESPLAZAMIENTO El 38 % de la población ha presentado algún tipo de enfermedad durante su desplazamiento, siendo las más comunes los dolores en general u otras, debido a que las personas no saben distinguir en sí qué clase de afección están padeciendo, ya sea por desconocimiento o por no poder acceder a la atención médica requerida. De igual forma, la presencia de enfermedades respiratorias, de piel y digestivas se deben a las precarias condiciones de salubridad y vivienda en que se encuentran asentadas las familias. (Ver Cuadro 9) Es relevante que, a la hora de la muestra, se presentan 151 mujeres en estado de embarazo, mientras que hay muchos con problemas de limitaciones físicas:101 personas con ceguera, 61 personas con sordera, 11 presentan casos de mudez, 49 con retraso mental, 35 con parálisis superior y 46 con parálisis inferior; 203 declararon tener otro tipo de limitación física; para un total de 303 personas que requieren una atención especial. CUADRO 9 - ENFERMEDADES DURANTE EL DESPLAZAMIENTO Enfermedades Ninguna Dolor en general Respiratorias Otras Digestivas Piel Cardiovasculares Piscosomaticas NS/NR Total

Población 4.900 1.307 694 339 337 240 142 106 11 8.076

% 60,7% 16,2% 8,6% 4,2% 4,2% 3,0% 1,8% 1,3% 0,1% 100,0%

2.11. OCUPACIÓN ANTERIOR Y ACTUAL DE LA POBLACIÓN DESPLAZADA Cuando observábamos el cuadro de necesidades de la población desplazada, podíamos notar que la oferta de empleo (0,9%) frente a la demanda (8,5%) generaba ya un gran vacío difícil de llenar debido a que las circunstancias socioeconómicas de Tumaco también son difíciles para sus propios habitantes. De la población apta para trabajar un 56,7% se dedicaba a labores relacionadas con el campo, la pesca y la ganadería, siendo el renglón agrícola el de mayor importancia; el 38,8% no trabajaba y el resto se dedicaba a actividades domésticas, comerciales o técnicas y en un menor grado provenían del sector docente o profesional. En el cuadro comparativo podemos observar que la disminución más notoria es la de los trabajos relacionados con la agricultura, que pasa de un 27,8% a tan solo un 4,2%. De igual forma el relacionado con el sector comercial (de un 1,5% a un 0,9%); aumentado el subempleo (del 14,8% al 24,1%) y obligando a los jóvenes y a las mujeres a dejar estudios y hogar para buscar fuentes de ingresos, muchas veces inestables y de poco fruto. Es alarmante la tasa de desempleo en la población desplazada, la cual alcanza, entre la población apta para trabajar, un porcentaje del 52,9%: eso quiere decir que una de cada dos personas con posibilidades de trabajar está desempleada. Esto, sumado al 24,1% de subempleados y al 10,1% de personas dedicadas al trabajo en el hogar nos da una cifra aterradoramente dolorosa del 87,1 % de la población en condiciones de no poder brindar a su familia unos ingresos mínimos para poder siquiera sobrevivir. (Ver Gráfico 5)

GRAFICO 5 - OCUPACIÓN

2.12. EDUCACIÓN ANTES Y DESPUÉS DEL DESPLAZAMIENTO Si el tema del trabajo es preocupante, no menos lo es el acceso a la educación por parte de la población desplazada. Sumado ya a los pocos o nulos ingresos de las familias que, no les permite por lo menos tener una comida diaria asegurada, mucho menos será en orden de prioridades el acceso a una vivienda, a la salud y a la educación respectivamente. La población en edad escolar que tenía acceso a la educación era de un 45,5%, lo cual ha disminuido de manera ostensible a tan solo un 26%. En cuanto al máximo grado de escolaridad alcanzado se observan dos cifras preocupantes pero que a la vez reflejan la realidad en la que viven la mayoría de los habitantes de la costa pacífica nariñense: baja escolaridad (47,6%) debido a la poca facilidad de acceder a la educación y un alto grado de analfabetismo o de inasistencia absoluta (19,1%) a cualquier medio de educación, formal o no formal . (Ver Gráficos 6 y 7)

GRAFICO 6 - ACCESO A LA EDUCACIÓN ANTES Y DESPUÉS DEL DESPLAZAMIENTO

GRAFICO 7 - NIVEL DE ESCOLARIDAD ALCANZADO

Datos hasta Diciembre 31 de 2004 JEFATURA FAMILIAR

TOTAL PERSONAS No. No. Familias Porcentaje Porcentaje Personas 19 0.04% 82 0.03% 5,499 11.05% 26,740 11.02% 302 0.61% 1,383 0.57% 49 0.10% 227 0.09% 6,351 12.77% 33,699 13.89% 156 0.31% 737 0.30% 939 1.89% 3,982 1.64% 5,019 10.09% 24,687 10.18% 305 0.61% 1,425 0.59% 684 1.37% 3,375 1.39% 2,843 5.71% 15,374 6.34% 2,566 5.16% 12,491 5.15% 1,436 2.89% 6,739 2.78% 710 1.43% 3,509 1.45% 25 0.05% 119 0.05% 146 0.29% 776 0.32% 1,874 3.77% 7,758 3.20% 889 1.79% 4,328 1.78% 1,040 2.09% 5,339 2.20% 2,853 5.73% 13,575 5.60% 2,550 5.13% 11,348 4.68% 1,540 3.10% 7,759 3.20% 2,849 5.73% 12,211 5.03% 98 0.20% 406 0.17% 272 0.55% 1,347 0.56% 919 1.85% 4,356 1.80% 1,143 2.30% 5,578 2.30%

COMPARATIVO DEPARTAMENTOS EXPULSORES DEPARTAMENTO AMAZONAS ANTIOQUIA ARAUCA ATLANTICO BOLIVAR BOYACA CALDAS CAQUETA CASANARE CAUCA CESAR CHOCO CORDOBA CUNDINAMARCA + BOGOTÁ GUAINIA GUAJIRA GUAVIARE HUILA MAGDALENA META NARIÑO NORTE SANTANDER PUTUMAYO QUINDIO RISARALDA SANTANDER SUCRE

ENCUESTAS EFECTUADAS DURANTE 2004 FAMILIAS 14,966 PERSONAS 72,133 DESPLAZAMIENTOS 2004 No. Familias Porcentaje No. Personas Porcentaje 10 380 35 12 40 19 57 1,001 20 83 63 251 26 101 1 16 198 148 38 205 428 250 174 13 10 47 8

0.25% 9.33% 0.86% 0.29% 0.98% 0.47% 1.40% 24.57% 0.49% 2.04% 1.55% 6.16% 0.64% 2.48% 0.02% 0.39% 4.86% 3.63% 0.93% 5.03% 10.51% 6.14% 4.27% 0.32% 0.25% 1.15% 0.20%

38 1,792 152 57 181 85 244 4,639 89 353 282 1,162 127 494 3 72 719 686 183 914 1,823 1,263 788 57 49 185 34

0.21% 9.67% 0.82% 0.31% 0.98% 0.46% 1.32% 25.03% 0.48% 1.90% 1.52% 6.27% 0.69% 2.67% 0.02% 0.39% 3.88% 3.70% 0.99% 4.93% 9.83% 6.81% 4.25% 0.31% 0.26% 1.00% 0.18%

3,489 2,777 85 161 162 49,750

7.01% 5.58% 0.17% 0.32% 0.33% 100%

16,283 14,987 408 768 771 242,567

6.71% 6.18% 0.17% 0.32% 0.32% 100%

Datos hasta Diciembre 31 de 2004 JEFATURA FAMILIAR

TOTAL PERSONAS No. No. Familias Porcentaje Porcentaje Personas 67 0.13% 260 0.11% 3,356 6.75% 16,094 6.63% 70 0.14% 329 0.14% 1,140 2.29% 5,418 2.23% 7,600 15.28% 39,513 16.29% 189 0.38% 872 0.36% 1,067 2.14% 4,311 1.78% 3,810 7.66% 18,855 7.77% 133 0.27% 614 0.25% 43 0.09% 196 0.08% 2,673 5.37% 14,816 6.11% 2,000 4.02% 9,972 4.11% 1,422 2.86% 6,970 2.87% 4,206 8.45% 20,797 8.57% 17 0.03% 90 0.04% 13 0.03% 60 0.02% 1,424 2.86% 5,689 2.35% 1,814 3.65% 8,995 3.71% 237 0.48% 1,225 0.51% 3,472 6.98% 16,293 6.72%

TOLIMA VALLE DEL CAUCA VAUPES VICHADA NO CONSIGNADO TOTAL DE LA MUESTRA

COMPARATIVO DEPARTAMENTOS RECEPTORES DEPARTAMENTO AMAZONAS ANTIOQUIA ARAUCA ATLANTICO BOLIVAR BOYACA CALDAS CAQUETA CASANARE CAUCA CESAR CHOCO CORDOBA CUNDINAMARCA + BOGOTÁ GUAINIA GUAJIRA GUAVIARE HUILA MAGDALENA META

334 86 5 8 7 4,074

8.20% 2.11% 0.12% 0.20% 0.17% 100%

1,610 393 17 25 20 18,536

8.69% 2.12% 0.09% 0.13% 0.11% 100%

ENCUESTAS EFECTUADAS DURANTE 2004 FAMILIAS 14,966 PERSONAS 72,133 DESPLAZAMIENTOS 2004 No. Familias Porcentaje No. Personas Porcentaje 24 402

0.59% 9.87%

90

1 55 924

0.02% 1.35% 22.68%

5 210

10 151 26 967 1 13 189 241 1 140

0.25% 3.71% 0.64% 23.74% 0.02% 0.32% 4.64% 5.92% 0.02% 3.44%

43 741 140

1,868

0.49% 10.08%

4,325

0.03% 1.13% 23.33%

4,446 3 60 701 1,085 5 644

0.23% 4.00% 0.76% 23.99% 0.02% 0.32% 3.78% 5.85% 0.03% 3.47%

4,796 1,168 52 219 1,011 864 988 2,770 3,114 2 13 49,750

9.64% 2.35% 0.10% 0.44% 2.03% 1.74% 1.99% 5.57% 6.26% 0.00% 0.03% 100%

20,379 6,064 215 968 4,833 4,336 5,099 12,375 16,833 12 84 242,567

DEPARTAMENTO AMAZONAS ANTIOQUIA ARAUCA ATLANTICO BOLIVAR BOYACA CALDAS CAQUETA CASANARE CAUCA CESAR CHOCO CORDOBA CUNDINAMARCA + BOGOTÁ GUAINIA

8.40% 2.50% 0.09% 0.40% 1.99% 1.79% 2.10% 5.10% 6.94% 0.00% 0.03% 100%

NARIÑO NORTE SANTANDER PUTUMAYO QUINDIO RISARALDA SANTANDER SUCRE TOLIMA VALLE DEL CAUCA VAUPES VICHADA TOTAL DE LA MUESTRA

511 267 3

12.54% 6.55% 0.07%

2,149 1,343 8

11.59% 7.25% 0.04%

13

0.32%

67

0.36%

57 77

1.40% 1.89%

280 318

1.51% 1.72%

0.02% 100%

5

1 4,074

18,536

0.03% 100%

NIVEL EDUCATIVO POR NUMERO DE FAMILIAS Y GRUPOS FAMILIARES FAMILIAS SEGÚN DEPARTAMENTO EXPULSOR Educación Jefe de Hogar Pre-escolar Primaria Bachillerato Otros Ninguna Sin Información Superior 19 42.1% 36.8% 15.8% 5.3% 5,499 1.2% 48.0% 14.8% 0.8% 1.3% 17.3% 16.6% 302 2.3% 51.3% 16.9% 1.0% 2.3% 8.3% 17.9% 49 2.0% 42.9% 30.6% 8.2% 2.0% 8.2% 6.1% 6,351 0.5% 31.4% 8.9% 0.5% 1.1% 30.8% 26.8% 156 3.2% 57.1% 21.2% 0.6% 1.3% 7.1% 9.6% 939 0.3% 66.7% 18.2% 1.2% 1.3% 7.6% 4.8% 5,019 0.5% 62.7% 17.0% 0.6% 0.5% 13.6% 5.2% 305 8.2% 41.0% 11.1% 4.9% 11.8% 3.9% 19.0% 684 1.0% 58.5% 17.3% 1.3% 0.6% 15.8% 5.6% 2,843 0.4% 45.4% 20.8% 0.8% 0.6% 16.9% 15.2% 2,566 0.7% 35.7% 22.9% 1.7% 0.8% 21.9% 16.3% 1,436 0.3% 45.2% 13.9% 10.2% 0.6% 16.0% 13.8% 710 1.8% 60.3% 20.3% 1.1% 0.4% 4.2% 11.8% 25 44.0% 24.0% 8.0% 24.0%

GUAJIRA GUAVIARE HUILA MAGDALENA META NARIÑO NORTE SANTANDER PUTUMAYO QUINDIO RISARALDA SANTANDER SUCRE TOLIMA VALLE DEL CAUCA VAUPES VICHADA NO CONSIGNADO TOTAL DE LA MUESTRA:

DEPARTAMENTO AMAZONAS ANTIOQUIA ARAUCA ATLANTICO BOLIVAR BOYACA CALDAS CAQUETA CASANARE CAUCA CESAR CHOCO

146 39.0% 26.0% 0.7% 2.7% 20.5% 11.0% 1,874 0.7% 44.9% 11.4% 0.6% 0.4% 9.7% 32.4% 889 0.1% 68.3% 15.4% 0.6% 0.9% 9.1% 5.6% 1,040 0.5% 47.5% 19.6% 0.8% 2.0% 19.0% 10.6% 2,853 0.5% 38.0% 10.5% 0.6% 0.4% 6.9% 43.1% 2,550 0.3% 53.1% 20.4% 0.7% 0.3% 13.6% 11.7% 1,540 0.1% 42.4% 11.1% 0.5% 0.4% 11.7% 33.8% 2,849 0.5% 52.3% 14.0% 0.7% 0.2% 4.7% 27.7% 98 2.0% 41.8% 25.5% 10.2% 20.4% 272 0.4% 63.2% 22.1% 1.5% 0.4% 8.1% 4.4% 919 0.8% 54.2% 19.9% 0.8% 0.4% 12.3% 11.6% 1,143 1.6% 34.6% 12.4% 3.5% 1.6% 21.2% 25.2% 3,489 0.5% 61.8% 21.3% 0.9% 0.4% 10.0% 5.0% 2,777 0.6% 53.4% 15.5% 0.6% 0.5% 21.1% 8.3% 85 17.6% 18.8% 4.7% 58.8% 161 0.6% 28.0% 13.7% 0.6% 7.5% 49.7% 162 0.6% 64.2% 17.9% 1.2% 0.6% 7.4% 8.0% 49,750 0.7% 48.2% 15.7% 1.1% 0.8% 15.7% 17.7% NIVEL EDUCATIVO POR NUMERO DE FAMILIAS Y GRUPOS FAMILIARES GRUPOS FAMILIARES SEGÚN DEPARTAMENTO EXPULSOR Miembros del Grupo Educación Pre-escolar Primaria Bachillerato Otros Ninguna Sin Información Familiar Superior 82 34.1% 15.9% 23.2% 26.8% 26,740 3.1% 43.2% 12.8% 0.4% 0.7% 10.9% 28.8% 1,383 3.6% 39.0% 12.4% 0.5% 0.9% 6.6% 36.9% 227 3.5% 33.0% 23.3% 2.6% 1.3% 9.3% 26.9% 33,699 2.6% 31.1% 10.7% 0.3% 0.7% 16.9% 37.7% 737 3.8% 42.9% 20.4% 0.5% 0.4% 5.6% 26.5% 3,982 1.3% 53.0% 18.1% 0.6% 0.7% 5.7% 20.6% 24,687 1.5% 50.6% 15.0% 0.3% 0.2% 16.8% 15.5% 1,425 15.0% 32.8% 11.2% 2.3% 7.2% 3.2% 28.4% 3,375 1.6% 48.8% 13.8% 0.4% 0.4% 12.4% 22.7% 15,374 1.4% 38.3% 16.9% 0.4% 0.3% 10.5% 32.3% 12,491 2.0% 35.4% 18.4% 0.6% 0.5% 12.1% 30.8%

CORDOBA 6,739 CUNDINAMARCA + BOGOTÁ 3,509 GUAINIA 119 GUAJIRA 776 GUAVIARE 7,758 HUILA 4,328 MAGDALENA 5,339 META 13,575 NARIÑO 11,348 NORTE SANTANDER 7,759 PUTUMAYO 12,211 QUINDIO 406 RISARALDA 1,347 SANTANDER 4,356 SUCRE 5,578 TOLIMA 16,283 VALLE DEL CAUCA 14,987 VAUPES 408 VICHADA 768 NO CONSIGNADO 771 TOTAL DE LA MUESTRA: 242,567

DEPARTAMENTO AMAZONAS ANTIOQUIA ARAUCA

4.8% 3.9% 7.6% 1.9% 5.2% 0.7% 1.9% 10.6% 0.7% 4.1% 1.1% 5.7% 1.9% 2.0% 4.8% 1.2% 1.4% 9.3% 11.2% 1.9% 2.8%

40.9% 45.5% 37.8% 30.9% 36.7% 52.4% 38.1% 32.7% 44.7% 39.4% 41.6% 38.4% 47.1% 45.5% 33.2% 48.6% 45.7% 25.2% 27.1% 52.3% 41.1%

9.7% 18.8% 14.3% 21.1% 8.5% 15.0% 17.0% 9.7% 18.3% 10.9% 12.3% 10.3% 21.8% 15.8% 12.1% 18.7% 13.3% 13.0% 7.8% 17.1% 13.9%

4.7% 0.4% 0.5% 0.3% 0.3% 0.5% 0.2% 0.3% 0.3% 0.3% 0.7% 0.3% 2.0% 0.4% 0.3% 0.2% 0.6% 0.5%

0.3% 0.5% 0.8% 1.9% 0.3% 0.5% 0.9% 0.2% 0.2% 0.3% 0.2% 0.4% 0.3% 1.0% 0.3% 0.2% 0.3% 0.1% 0.5%

10.4% 4.5% 5.0% 14.7% 6.8% 10.1% 14.3% 4.6% 14.2% 10.7% 5.9% 6.9% 7.7% 7.6% 13.0% 7.4% 14.3% 3.7% 4.7% 5.6% 11.5%

29.1% 26.4% 34.5% 28.9% 42.1% 20.9% 27.3% 42.0% 21.7% 34.4% 38.5% 38.7% 20.3% 28.5% 33.9% 23.4% 24.7% 48.5% 49.0% 22.3% 29.7%

NIVEL EDUCATIVO POR NUMERO DE FAMILIAS Y GRUPOS FAMILIARES FAMILIAS SEGÚN DEPARTAMENTO RECEPTOR PreEducación Jefe de Hogar Primaria Bachillerato Otros Ninguna Sin Información escolar Superior 67 20.9% 6.0% 1.5% 1.5% 70.1% 3,356 1.0% 51.4% 12.8% 0.9% 0.8% 18.7% 14.4% 70 1.4% 50.0% 2.9% 1.4% 5.7% 38.6%

ATLANTICO BOLIVAR BOYACA CALDAS CAQUETA CASANARE CAUCA CESAR CHOCO CORDOBA CUNDINAMARCA + BOGOTÁ GUAINIA GUAJIRA GUAVIARE HUILA MAGDALENA META NARIÑO NORTE SANTANDER PUTUMAYO QUINDIO RISARALDA SANTANDER SUCRE TOLIMA VALLE DEL CAUCA VAUPES VICHADA TOTAL DE LA MUESTRA:

DEPARTAMENTO AMAZONAS

1,140 0.4% 50.0% 26.4% 0.4% 0.2% 20.8% 1.8% 7,600 0.6% 27.3% 8.2% 0.4% 2.2% 33.1% 28.2% 189 4.8% 50.8% 23.3% 1.1% 1.6% 7.9% 10.6% 1,067 0.4% 62.6% 22.5% 1.8% 1.6% 7.7% 3.5% 3,810 0.0% 66.2% 14.1% 0.4% 0.5% 15.6% 3.1% 133 26.3% 32.3% 4.5% 9.8% 27.1% 43 2.3% 46.5% 34.9% 2.3% 4.7% 9.3% 2,673 0.2% 46.7% 19.6% 0.6% 0.4% 16.9% 15.6% 2,000 0.6% 37.4% 25.5% 1.6% 0.4% 16.5% 18.2% 1,422 0.1% 52.3% 10.8% 10.2% 0.1% 11.8% 14.6% 4,206 2.7% 55.8% 27.4% 1.5% 0.5% 8.2% 3.9% 17 58.8% 29.4% 11.8% 13 15.4% 84.6% 1,424 0.4% 55.8% 12.2% 0.6% 0.3% 11.4% 19.4% 1,814 0.6% 65.7% 15.6% 0.5% 0.1% 9.4% 8.2% 237 0.4% 54.0% 20.7% 3.4% 14.8% 6.8% 3,472 0.1% 25.9% 7.1% 0.3% 0.2% 4.8% 61.6% 4,796 0.1% 51.3% 16.9% 0.6% 0.3% 7.6% 23.2% 1,168 50.8% 12.9% 0.3% 0.3% 13.2% 22.4% 52 1.9% 40.4% 21.2% 7.7% 28.8% 219 0.5% 57.1% 5.9% 6.8% 29.7% 1,011 0.2% 67.0% 21.1% 0.7% 0.4% 8.5% 2.2% 864 0.2% 59.4% 14.0% 0.2% 0.6% 13.7% 11.9% 988 1.8% 36.1% 8.7% 6.9% 0.4% 11.0% 35.0% 2,770 0.1% 60.8% 23.1% 1.1% 0.6% 10.8% 3.5% 3,114 0.5% 53.8% 15.0% 0.6% 0.5% 22.8% 6.8% 2 50.0% 50.0% 13 46.2% 23.1% 30.8% 49,750 0.7% 48.2% 15.7% 1.1% 0.8% 15.7% 17.7% NIVEL EDUCATIVO POR NUMERO DE FAMILIAS Y GRUPOS FAMILIARES GRUPOS FAMILIARES SEGÚN DEPARTAMENTO RECEPTOR Miembros del Grupo PreEducación Primaria Bachillerato Otros Ninguna Sin Información Familiar escolar Superior 260 14.2% 9.6% 0.8% 0.8% 53.1% 21.5%

ANTIOQUIA ARAUCA ATLANTICO BOLIVAR BOYACA CALDAS CAQUETA CASANARE CAUCA CESAR CHOCO CORDOBA CUNDINAMARCA + BOGOTÁ GUAINIA GUAJIRA GUAVIARE HUILA MAGDALENA META NARIÑO NORTE SANTANDER PUTUMAYO QUINDIO RISARALDA SANTANDER SUCRE TOLIMA VALLE DEL CAUCA VAUPES VICHADA TOTAL DE LA MUESTRA:

16,094 329 5,418 39,513 872 4,311 18,855 614 196 14,816 9,972 6,970 20,797 90 60 5,689 8,995 1,225 16,293 20,379 6,064 215 968 4,833 4,336 5,099 12,375 16,833 12 84 242,567

2.3% 0.9% 0.9% 4.1% 4.8% 1.3% 1.5% 31.4% 1.0% 0.8% 1.0% 3.3% 3.0%

0.8% 0.6% 0.9% 13.8% 0.5% 1.8% 0.9% 0.2% 1.0% 1.5% 4.3% 0.8% 1.4%

2.8%

45.5% 26.1% 41.6% 29.1% 39.3% 51.1% 53.3% 25.1% 45.4% 37.7% 36.9% 45.9% 43.6% 51.1% 23.3% 44.1% 50.7% 40.4% 25.5% 41.8% 46.0% 28.8% 46.0% 52.0% 48.0% 34.7% 50.1% 46.4% 8.3% 58.3% 41.1%

11.3% 1.8% 21.7% 9.9% 19.2% 20.2% 13.5% 9.0% 21.9% 16.4% 20.9% 7.0% 21.1% 23.3%

0.3%

9.0% 13.9% 20.2% 6.5% 15.1% 12.0% 18.1% 4.3% 19.1% 14.2% 11.0% 20.6% 13.0% 25.0% 10.7% 13.9%

0.3% 0.2% 0.3% 0.1% 0.2% 0.2% 0.9%

0.3% 0.2% 1.1% 0.1% 0.2% 0.3%

0.4% 0.3% 3.4% 0.4% 0.3%

0.2% 0.4% 0.3% 0.3% 0.3%

0.5%

1.2% 0.5%

0.1% 0.3% 0.6% 0.8% 0.2% 5.0% 0.5% 0.4% 0.6% 4.5% 0.6%

0.4% 0.3% 0.1% 1.2% 0.6% 0.7% 0.2% 16.6% 2.6% 0.2% 0.3% 0.0% 0.4%

11.4% 4.6% 17.1% 18.3% 7.8% 5.6% 21.3% 13.8% 10.6% 8.4% 7.7% 7.1% 8.9% 45.0% 8.1% 11.7% 10.9% 2.9% 8.3% 12.4% 3.3% 3.3% 7.1% 7.4% 5.8% 7.0% 14.8% 16.7% 7.1% 11.5%

28.7% 66.3% 18.5% 37.2% 27.8% 20.4% 9.9% 12.9% 14.8% 33.9% 31.9% 31.5% 24.2% 16.7% 31.7% 37.4% 22.7% 26.1% 51.1% 33.9% 27.3% 47.9% 46.2% 20.2% 28.3% 40.4% 20.9% 23.8% 50.0% 22.6% 29.7%

XX ANIVERSARIO DE LA DECLARACIÓN DE CARTAGENA Plan de Acción de México “Para fortalecer la Protección Internacional de los Refugiados en América Latina” Representantes de 18 países latinoamericanos firmaron en Ciudad de México una declaración que contempla una serie de acciones para afianzar la protección de los refugiados en toda la región al finalizar la reunión conmemorativa del vigésimo aniversario de la Declaración de Cartagena sobre los refugiados. A la reunión, cuyo fin era reafirmar la importancia y la vigencia de los principios contemplados en este documento y encarar los actuales desafíos de la región con un ambicioso plan de acción. participaron altos funcionarios de todos los países de América Latina, expertos y líderes de la sociedad civil. El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los refugiados, Ruud Lubbers, inauguró el evento, que tuvo como anfitrión al gobierno mexicano y fue organizado por el ACNUR y el Consejo Noruego para los Refugiados y patrocinado por los órganos del Sistema Interamericano de Derechos Humanos. La Declaración de Cartagena sobre los refugiados de 1984 es un documento histórico que ofrece un enfoque innovador a la protección de los refugiados y a la búsqueda de soluciones; de igual manera amplía la definición de refugiado aplicada en América Latina. "Cartagena ha contribuido a asegurar que las personas, cuya necesidad de protección es evidente, reciban asistencia y protección. Por esta razón, 20 años después es fundamental reiterar su validez e importancia para todos los países de la región", dijo el Secretario de Relaciones Exteriores de México, Luis Ernesto Derbez, en la apertura del evento. Desde que la Declaración de Cartagena fue adoptada hace 20 años, la mayoría de los estados de América Latina han incorporado sus principios en su legislación nacional o la aplican en la práctica. Los refugiados en América Latina, la mayoría provenientes de Colombia y Haití, pero también de Angola, Iraq, Liberia, Senegal, Sierra Leona y otros países, han encontrado protección internacional en los países latinoamericanos gracias a la aplicación complementaria de la Convención 1951 y la Declaración de Cartagena. "En un contexto mundial de políticas de asilo restrictivas y deterioro de los principios de protección, es reconfortante ver que los países en América Latina están comprometidos en mantener altos estándares de protección", dijo el Alto Comisionado, Ruud Lubbers. "El ACNUR quiere continuar trabajando con los gobiernos y la sociedad civil de la región para consolidar la colaboración en materia de protección." El Plan de la Acción adoptado en Ciudad de México contiene los principales desafíos de protección a los refugiados en América Latina, entre los cuales se cuentan proyectos para lograr la autosuficiencia de un creciente número de refugiados en los principales centros urbanos, así como el desarrollo de los sistemas de asilo y la construcción de la capacidad de protección de los gobiernos y las organizaciones no gubernamentales que trabajan con los refugiados. El Plan involucra también las necesidades humanitarias de la gente que huye por la violencia en Colombia. Las organizaciones humanitarias estiman que cerca de 300.000 colombianos que necesitan protección han cruzado las fronteras hacia Ecuador, Panamá, Costa Rica y Venezuela. El Plan incluye un exhaustivo programa para determinar las necesidades de los colombianos y

de las comunidades receptoras, especialmente en las zonas fronterizas de los países vecinos, permitiendo orientar y desarrollar actividades humanitarias complementarias. El Plan de Acción propone medidas concretas que incluyen los esfuerzos por alcanzar la autosuficiencia y la integración local en las ciudades (programa de Ciudades Solidarias), estimular el desarrollo social y económico en las zonas fronterizas para beneficiar a los refugiados y a la población local (programa Fronteras Solidarias) y la creación de un programa de reasentamiento en América Latina, que busca aligerar la carga de los países que reciben una gran cantidad de refugiados (programa de Reasentamiento Solidario). "Estoy convencido que la Declaración y el Plan de Acción, que será adoptado en este evento, darán un nuevo impulso a los principios de Cartagena y contribuirán a poner en práctica las políticas diseñadas para alcanzar soluciones adecuadas y duraderas a los nuevos desafíos que hacemos frente", dijo el Secretario de Relaciones Exteriores de México, Luis Ernesto Derbez. (ACNUR, 17 Noviembre 2004)

SABIA USTED? PRINCIPIOS RECTORES Y CONSTITUCIÓN Las disposiciones contenidas en los Principios Rectores han sido consideradas por la Corte Constitucional como parte del bloque de constitucionalidad colombiano y, por ende, elevadas al rango de la Constitución Política de Colombia, en la medida en que recogen las obligaciones internacionales del Estado establecidas en los distintos tratados que en materia del Derecho Internacional de los Derechos Humanos, del Derecho Internacional Humanitario y del Derecho Internacional de los Refugiados ha suscrito el Estado colombiano.

VATICANO A LA ONU: La dramática situación de los refugiados requeriría, en ocasiones, una «injerencia humanitaria»

GINEBRA, lunes, 11 octubre 2004 (ZENIT.org).- Las guerras constituyen la causa de millones de refugiados esparcidos por el mundo de manera que no se puede afrontar esta emergencia sin solucionar estos conflictos, considera la Santa Sede. Por este motivo, al tomar la palabra ante la sesión del Comité ejecutivo del Programa del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), celebrada del 4 al 8 de octubre, la delegación vaticana pidió recurrir, si es necesario, a una «injerencia humanitaria» en los países en los que se pisotean los derechos fundamentales de los refugiados. Al tomar la palabra en Ginebra, el arzobispo Silvano M. Tomasi, comenzó recordando que «los derechos reconocidos a los refugiados por los tratados internacionales son con demasiada frecuencia puras palabras». Y el fenómeno en vez de solucionarse se agrava, constató: «las continuas guerras siguen obligando a muchas personas a abandonar sus hogares a causa del miedo a la persecución, de la violación de derechos humanos, de las hostilidades y de la expansión de la violencia con el uso sistemático del estupro como táctica de guerra». «El coste de estos movimientos forzados es altísimo: el sufrimiento de personas, la pérdida de vidas, el proceso de reconstrucción de la sociedad», afirmó monseñor Tomasi, misionero de San Carlos (Scalabriniano), quien hasta hace poco era nuncio apostólico en Etiopía y Eritrea. «Los derechos humanos y el derecho humanitario internacional obligan a los gobiernos a ofrecer seguridad y bienestar a aquellos que están bajo su jurisdicción», recordó el prelado. «En particular -añadió-, cada ciudadano tiene el derecho a la protección por su propio país. Si un Estado no puede o no quiere cumplir con esta responsabilidad y los derechos humanos de una población son pisoteados, entonces la comunidad internacional puede y debería reafirmar su preocupación, tomar cartas en el asunto y cumplir con su obligación». El delegado vaticano recordó el Mensaje de Juan Pablo II para la Jornada Mundial de la Paz del 1 de enero de 2000, en el que afrontaba la espinosa cuestión de la «injerencia humanitaria». «Evidentemente, cuando la población civil corre peligro de sucumbir ante el ataque de un agresor injusto y los esfuerzos políticos y los instrumentos de defensa no violenta no han valido para nada, es legítimo, e incluso obligado, emprender iniciativas concretas para desarmar al agresor», recordaba el Santo Padre.

«Pero éstas han de estar circunscritas en el tiempo y deben ser concretas en sus objetivos aclaraba-, de modo que estén dirigidas desde el total respeto al derecho internacional, garantizadas por una autoridad reconocida a nivel supranacional y en ningún caso dejadas a la mera lógica de las armas». «Por eso -añadía-, habrá que hacer un mayor y mejor uso de lo que prevé la Carta de las Naciones Unidas, definiendo posteriormente instrumentos y modalidades eficaces de intervención, en el marco de la legalidad internacional». «A este propósito la misma Organización de las Naciones Unidas tiene que ofrecer a todos los Estados miembros la misma oportunidad de participar en las decisiones, superando privilegios y discriminaciones que debilitan su papel y credibilidad», proponía el Santo Padre. El representante vaticano, tras leer la propuesta papal, concluía: «La oportunidad de esta intervención es decisiva para salvar vida y constituye un test del compromiso de la comunidad internacional por la causa de los refugiados». En una entrevista concedida al diario turinés «La Stampa» (22 de septiembre de 2004), el cardenal Angelo Sodano, secretario de Estado, reveló que en el marco del proceso de reforma que tiene lugar en el seno de la ONU, la Santa Sede propondrá añadir un nuevo principio de «injerencia humanitaria» en la Carta de Naciones Unidas. (Cf. Zenit, 9 de octubre de 2004, «Injerencia humanitaria, pros y contras»).