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Jueves 4 de diciembre de 2008
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SANTA CRUZ Y CUESTIONAMIENTO A LA JUSTICIA
POLI TICA Jueves 4 de diciembre de 2008
LOS CAMBIOS EN EL GOBIERNO Y POLEMICA POR EL VETO PRESIDENCIAL
EL ESCENARIO
CARLOS PAGNI PARA LA NACION
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Pidieron que los dejen seguir siendo querellantes en el proceso MARIELA ARIAS CORRESPONSAL EN SANTA CRUZ
ARCHIVO
Varizat, la noche del incidente
La historia del caso 17 de agosto de 2007
Por encima Daniel Varizat atropella con una camioneta 4x4 a una manifestación de docentes en Río Gallegos. Queda detenido.
2 de septiembre de 2007
Procesado La jueza Valeria López Lestón procesa a Varizat por encontrarlo responsable de lesiones graves y leves en 25 casos. En el fallo compara el uso de la camioneta con un arma y determina que el ex ministro apretó el acelerador.
9 de noviembre de 2007
8 de agosto de 2008
Beneficiado Varizat es beneficiado con la excarcelación y queda en libertad después de pagar 15.000 pesos de fianza al contado. Parte en una camioneta rumbo a Buenos Aires, donde fija residencia. Retrasos La Cámara Criminal de Río Gallegos devuelve la causa a primera instancia y demora el juicio oral contra el ex funcionario.
la Legislatura por la mayoría kirchnerista y la fuerte resistencia de los diputados de la oposición. Trascendió que el tratamiento de su designación en el recinto será en marzo. Mientras tanto, y en la cruzada por permanecer como querellantes de la causa, los abogados de las víctimas recusaron la medida de la Cámara Criminal, cuestionaron a los jueces y pidieron que se declarara la nulidad de la medida. Se constituyó otro tribunal integrado por los jueces Luis Cancelo y Marcela Topcic, quienes el martes pasado rechazaron la recusación sobre los jueces, consideraron que no eran imparciales y ahora están habilitados para tratar la nulidad. Chávez y Mercau deberán fallar otra vez sobre el apartamiento de la querella y es casi imposible que los jueces fallen en contra de ellos mismos. “Siempre en situaciones análogas la parte querellante había participado del juicio, pero hace quince días el Tribunal cambió de criterio”, dijo Javier Pérez Gallart, uno de los abogados querellantes, a LA NACION. “Nosotros participamos hasta ahora sin ningún inconveniente, aportamos pruebas, soportes fílmicos y fotográficos de esa noche, hasta ahora, que cambiaron de criterio. Se está armando un anillo de impunidad para proteger a Varizat”, opinó el abogado querellante. En tanto, la docente Marta Susana Guillermaz –estuvo cinco días en coma después del accidente– expresó: “Los jueces que nos han dejado sin la posibilidad de defendernos son después ascendidos, lo cual indica que hay un claro componente comprometido del manejo y manipulación de la Justicia”. Para el ex fiscal Andrés Vivanco, quien instruyó la causa contra Varizat el año pasado –ahora está jubilado y asumió como abogado querellante–, las víctimas “corren el riesgo de perder los derechos y garantías que el Código Procesal, la Constitución y otras normas internacionales les deben asegurar”.
Video. Caso Varizat: duro revés para las víctimas, Por Mariela Arias. www.lanacion.com.ar
El gobernador de San Juan, José Luis Gioja; la presidenta Cristina Kirchner, y la ex secretaria de Ambiente, Ro omina Picolotti
La ley de los glaciares in nfluyó en la destitución de Picoolotti La ex secretaria de Ambiente había quedado enfrentada con los Kirchner K y Gioja GUSTAVO YBARRA LA NACION Todos los indicios señalan a la empresa minera de origen canadiense Barrick Gold y al gobernador de San Juan, José Luis Gioja, como los responsables de haber convencido a Cristina Kirchner de vetar la totalidad de la ley de presupuestos mínimos para la protección de los glaciares, una norma por la que la ex secretaria de Ambiente y Desarrollo Sustentable Romina Picolotti quedó enfrentada con la Presidenta. Si bien la expulsión de Picolotti del Gobierno respondió a otros motivos que tienen que ver con manejos irregulares en su dependencia, lo cierto es que esta ley vital para dotar a la Argentina de herramientas para afrontar la disputa por el agua potable habría colmado los ánimos de la Casa Rosada. Esa es la impresión que impera en el Congreso y en otros ámbitos del poder. Tanto es así que el titular del Instituto Nacional de Tecnología
Industrial (INTI), Enrique Martínez, suscribió una carta en la que bautizó “el veto Barrick” la decisión presidencial. Consultados por LA NACION, en la empresa niegan haber tenido vinculación con la ley. “Esa denominación es infundada y no corresponde. Barrick no ha participado en el proceso de dicha legislación”, afirmó Rodrigo Jiménez, vicepresidente de Asuntos Corporativos para América del Sur de la firma. Gioja, en tanto, admitió su rechazo a la norma sancionada por el Congreso el 22 de octubre último, pero
negó haber sido el responsable del veto. “Esto no es una cuestión de una sola persona, es una decisión compartida con el Poder Ejecutivo y los gobernadores Jaque (Celso, Mendoza) y de Neuquén (Jorge Sobisch)”, aseguró. En diálogo con LA NACION, Gioja aseguró que “el proyecto (por la ley) tiene algunos defectos: no está bien definido lo que es la zona periglacial y prohíbe la obra pública en esa zona, algo que es facultad de las provincias”. Ningún proyecto minero está radicado en donde hay
Bibiloni asume hoy El gobierno de Cristina Kirchner pondrá en funciones hoy al nuevo secretario de Ambiente y Desarrollo Sustentable, Homero Máximo Bibiloni, que asumirá a las 14.30 en el Salón Sur de la Casa Rosada. “El primer objetivo de Bibiloni será recuperar los desmanejos que hizo Romina Picolotti, verá qué hay ahí adentro y luego verá”, comentaron a LA NACION altas fuentes de la Casa Rosada. Durante su juramento, Bibiloni esbozará los lineamientos de su gestión. Se estima que uno de los primeros conflictos por resolver será el de la planta pastera Botnia en Fray Bentos. Es posible que Bibiloni intente un acercamiento con los asambleístas de Gualeguaychú que mantienen el corte desde hace dos años.
glaciares”, agregó. Cuando se habla del veto, las miradas también apuntan al secretario de Minería, José Mayoral, sanjuanino y hombre de Gioja. “Tengo información de que el ingeniero Mayoral tiene intereses en algunas empresas mineras, y si bien creo que se excusó de intervenir en casos en los que estaban involucradas estas empresas mineras, es un hombre del sector”, aseguró Miguel Bonasso, titular de la Comisión de Recursos Naturales de la Cámara baja. Pero el veto a la ley de glaciares deja, además, al descubierto la falta de consideración de los Kirchner hacia el Parlamento. Sólo así se entiende que el proyecto haya sido aprobado en ambas cámaras legislativas por unanimidad y sin que mediara palabra alguna del Poder Ejecutivo hasta el veto. Tanto es así que en el Senado varios legisladores oficialistas confiesan que apoyaron la iniciativa confiados porque la impulsaba la ahora despedida Romina Picolotti.
on pocas figuras extranjeras Cristina Kirchner se lleva tan bien, en estos días, como con Michelle Bachelet. Tal vez aproveche esa simpatía para sugerir hoy a su anfitriona chilena una reforma en los estatutos de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur). Bachelet es presidenta pro témpore de esa liga regional. El gobierno argentino aspira a que el secretario general sea designado por la mayoría del bloque y no por unanimidad. Así Néstor Kirchner accedería, quizás, a la Secretaría para la que fue postulado por el ecuatoriano Rafael Correa y vetado por el uruguayo Tabaré Vázquez. La idea de que la designación del secretario general no se realice por unanimidad se sostendría en que el artículo del Tratado de la Unasur que regula ese proceso no habla de “consenso”. Pero esa interpretación debería ser validada por consenso. ¿Se animará Jorge Taiana a explicar esa contradicción a su jefa durante el viaje? La modificación reglamentaria, de producirse, tendría una consecuencia grave: Uruguay dejaría la Unasur. Por eso los diplomáticos que están al tanto de la propuesta argentina no creen que Bachelet vaya a aceptarla. Alejandro Foxley, su canciller, dijo que la candidatura de Kirchner podría ser reanimada cuando los presidentes de la región se encuentren en el balneario brasileño de Costa de Sauipe, el próximo
16, para una cumbre regional. Después habló el canciller de Perú, José García Belaunde, para recordar el veto de Uruguay. El tosco movimiento que la diplomacia argentina podría realizar hoy en Punta Arenas importa por las tensiones que genera, con independencia de los resultados: nadie está demasiado convencido de que Kirchner quiera mudarse a Quito, lejos de la campaña electoral bonaerense (le encargó al sociólogo Artemio López que midiera su popularidad; no más que eso) y, sobre todo, de
El Gobierno quiere que el secretario general de la Unasur se elija por mayoría y no por consenso la Casa Rosada. A pesar de los que piensan que el exilio quiteño podría salvar del hundimiento al gobierno de Cristina Kirchner. ¿El plácet uruguayo hubiera cambiado la historia del kirchnerismo? Un enigma para las ucronías de Rosendo Fraga. Vázquez expresó un rechazo a Kirchner del que también participaban el colombiano Alvaro Uribe y el peruano Alan García. El alineamiento argentino con Hugo Chávez hizo temer a Uribe y a García que la Unasur se convirtiera en un instrumento del emir bolivariano. Este conflicto comenzó a jugarse
en otro campo de batalla: el de la crisis que se desató entre Ecuador y Brasil a raíz de que el gobierno de Correa desconoció su deuda con el Banco Nacional de Desenvolvimiento Económico (Bndes), contraída por el financiamiento de trabajos de la constructora Odebrecht, que había sido expulsada del país. Itamaraty retiró a su embajador en Quito, algo que no había hecho con el representante en Bolivia cuando Evo Morales nacionalizó inversiones de Petrobras, en 2006. El malestar es comprensible: la internacionalización de las constructoras, apoyada por el Bndes, es un estrategia principal de Brasil en la región. Por eso hay un detalle que desvela a Lula da Silva: el respaldo que consiguió Ecuador de los presidentes de la Alternativa Bolivariana de las Américas, congregados por Chávez el fin de semana pasado. La posibilidad de que se produzca una cadena bolivariana de cesaciones de pagos inquieta a Brasilia. Contratos similares al que denunció Ecuador existen en Bolivia y en Venezuela. La pelea con Correa tal vez debilite el mudo respaldo de Lula a las pretensiones de Kirchner. El brasileño no se pronunció por ninguna candidatura para la Unasur. Da por tan obvio su respaldo a la Argentina que ni siquiera lo expresa. Algunos observadores sospechan en ese silencio la pretensión de ver a su asesor Marco Aurelio Garcia al frente de una asociación que, al fin y al cabo, fue concebida en Itamaraty. Si tiene que imponer a Garcia, los brasileños no lo harán por un
esfuerzo propio, sino porque sus competidores salieron de pista. Brasil quiere acelerar las definiciones en la Unasur. Sobre todo en la constitución de su Consejo de Defensa, que no desea ver en manos de alguien con exóticos aliados, como Chávez. La semana pasada el venezolano exhibió de nuevo su vínculo con Rusia y recibió a su colega Dimitri Medvedev. Rusia está ingresando a la región por la puerta energética: Gazprom pretende activos bolivianos y Lukoil negocia la compra del 20% de Repsol YPF. Los gobiernos sudamericanos están muy mal coordinados frente a la crisis internacional. A las tensiones anteriores hay que sumar el malhumor que produce en Brasilia el avance, muy acelerado, de Danilo Astori hacia la candidatura del Frente Amplio en Uruguay. Astori es el principal abogado de que su país firme un tratado de libre comercio con los Estados Unidos. El idilio entre Buenos Aires y Brasilia tampoco está asegurado. Los Kirchner no acompañan el librecambismo industrial de Lula en la Ronda de Doha. El proteccionismo argentino será más agresivo cuando se refiera al comercio bilateral. El déficit en la balanza con Brasil podría bajar el año que viene de 5000 a 4000 millones de dólares. Pero el desequilibrio será más notorio: la Argentina no tendrá un superávit comercial de 12.000, sino de 2000 millones. El clamor por una devaluación será creciente. La tensión de los Kirchner con Lula también.
Y ERA JEFE DE LA OFICINA ANTICORRUPCION
Murió Fleitas Ortiz de Rozas El jefe de la Oficina Anticorrupción (OA), Abel Fleitas Ortiz de Rozas, murió en la madrugada de ayer, a los 65 años, como consecuencia de una larga enfermedad. El funcionario había asumido su cargo en diciembre de 2004, durante la gestión de Gustavo Beliz en el Ministerio de Justicia, en cuya órbita está la OA, y con el respaldo del entonces jefe de Gabinete, Alberto Fernández.
Además de ser fiscal de control administrativo en la OA, Fleitas era profesor de derecho civil en la Universidad Nacional de La Plata y en la Universidad de Buenos Aires. Antes de llegar a la jefatura del organismo anticorrupción, entre 2003 y 2004 fue secretario de Asuntos Legislativos del Ministerio de Justicia. Entre 1964 y 1976, había sido fue juez federal en lo civil y comercial. Nació en 1943, en la ciudad de Bue-
nos Aires. Estaba casado en segundas nupcias con Silvina Fazio, abogada. Tenía cinco hijos y seis nietos. Se recibió de abogado en la UBA, en 1967, con medalla de oro y premio al mejor promedio. En el regreso de la democracia participó de la renovación peronista. Los restos de Fleitas fueron velados ayer por la tarde. El sepelio será hoy, a partir de las 11.30, en el cementerio de la Recoleta.
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Y ENCUESTA
La Presidenta intercede por su marido
Presión de las víctimas de Varizat por un juicio justo RIO GALLEGOS. Las víctimas de Daniel Varizat pidieron al Tribunal Superior de Justicia que los dejaran seguir siendo querellantes en el proceso que se le sigue al ex funcionario kirchnerista. Lo hicieron por medio de la presentación de un recurso de casación para que se declare la inconstitucionalidad de la medida por la cual la querella fue apartada de la causa. El 17 de agosto de 2007 Varizat atropelló con una camioneta 4x4 a una manifestación de docentes y estatales que rodearon su auto en señal de protesta. La semana pasada la Cámara Criminal de Río Gallegos decretó el cese de la intervención de la parte querellante al considerar que los abogados no habían formalizado la acusación en la etapa de instrucción en forma independiente, sino que habían adherido a la acusación del fiscal. La decisión fue tomada por los jueces Jorge Chávez y Alicia de los Angeles Mercau, ambos cercanos a los Kirchner. La decisión generó una fuerte reacción de la gente frente a los tribunales provinciales, que con silbatos y despertadores se plantaron frente al edificio con el mensaje “Ayúdenos a despertar a la justicia-juicio y castigo para Varizat”. Ambos jueces fueron ascendidos en los últimos tiempos. Chávez, ex candidato a intendente por el PJ, ministro de Asuntos Sociales durante la gobernación de Néstor Kirchner, saltó de la política a la Justicia como juez de cámara. En octubre pasado fue designado mediante el decreto nacional 1661/2008, firmado por la presidenta Cristina Kirchner, para integrar el futuro Tribunal Oral Federal de Río Gallegos. Chávez aún no asumió, y fue parte de este fallo conveniente para Varizat. Por su parte, la jueza Alicia de los Angeles Mercau ganó la terna postulada por el actual gobernador Daniel Peralta para ser promovida al Tribunal Superior de Justicia de Santa Cruz. La semana pasada, el pliego de Mercau fue aprobado en las comisiones correspondientes de
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ARCHIVO
Abel Fleitas Ortiz de Rozas
Poco apoyo a la lucha contra la corrupción Los argentinos no creen en sus políticos Para los argentinos, la ilegalidad está instalada en los ámbitos del poder público. Es que sólo el 22 por ciento percibe progresos en la lucha contra la corrupción. Y esa cifra es una de las más bajas al compararse con los resultados de los demás países de América latina, tal como lo muestra el informe Latinobarómetro 2008, que será presentado hoy. Ese trabajo tomó en cuenta las respuestas de 20.200 personas de 18 países de la región, de las cuales 1200 pertenecen a la Argentina. También en la Argentina se visualiza una de las menores aprobaciones sobre la labor de los políticos locales, apoyados sólo por el 35 por ciento de los consultados. Tampoco los empresarios convencen con sus actividades a los argentinos, ya que sólo el 37 por ciento los respalda, situación que representa uno de los más bajos niveles de aceptación empresarial en la región. En una situación coinciden casi todos los argentinos: el 97 por ciento está preocupado por el peso de la inflación en sus economías personales. En el análisis de los 18 países se determina que el 37 por ciento está satisfecho con la democracia, mientras que el 57 por ciento apoya el régimen de elecciones libres, cifra que marca una aumento con relación a otros años. Los gobiernos de la región cuentan a su vez con un importante apoyo, puesto que el 52 por ciento considera de manera positiva la acción de los mandatarios. Ese promedio desciende por cuatro países en los cuales sus gobiernos obtienen la aprobación de menos de un tercio de sus habitantes. Entre esas naciones más desconfiadas de sus gobernantes figura la Argentina, junto con Honduras, Nicaragua y Perú. En Brasil, en cambio, la aprobación al presidente Lula da Silva alcanza el 79 por ciento de los consultados.
