Escrivá de Balaguer

11 dic. 2014 - De una de esas visi- tas, Pemán dejó testimonio en un artícu- lo memorable del Séneca. Allí se explica- b
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apropiadas o corruptas hado a la institución y conscienorrupción se estaba conviralón de Aquiles de la monarentaria. La popularidad del no dejaba de caer y la forma no era incuestionable. bien acompañado por su esa la faena de recuperación. ra aparte su empeño en depráctica la utilidad de la Cospaña actual, convirtió en s las cuentas de la Casa Real, amilia a la infanta Cristina y ales y estableció un código s empleados de La Zarzuela cualquier modalidad de tráncias. ncidiendo con el barómetro

no se ha cargado la a, como temía su puesto bastante de para asentarla

usquimanos los detuvieron en el naufragio del hachís en el i Petri. Y eso no es todo, porvenido después. imos días aparecen fardos de playas gaditanas, como si fueantiguos que tanto en Cádiz blar. El jueves, en Cortadura, se encontraron un fardo con chís, mientras practicaban su rido. Las criaturas se llevaron , así que para evitar errores prácticas, que eran estrictaivas, avisaron a la Policía Loros, no busquimanos, y no esos para confusiones indeseae puede acabar en el talego, si unas horas. grana también ha aparecido

areciendo fardos de las playas como si s duros antiguos dieron que hablar

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OPINIÓN del CIS en el que –tremendo dato– el 63,8% de los españoles señalan a la corrupción como el principal problema de la sociedad española, ha dado una vuelta de tuerca a su exigencia de austeridad y ejemplaridad, predicando con el ejemplo. A partir de enero los miembros de la Familia Real (ahora son pocos: él mismo, sus padres, su esposa y sus hijas) no podrán aceptar favores tan tradicionales como vuelos gratis o préstamos sin intereses ni aceptar regalos que vayan más allá de los usos habituales, sociales o de cortesía. Vamos, que no recibirán yates como el Fortuna paterno pagado a escote por empresarios afortunados o los Ferraris de ricachones árabes. ¿Cuál sería el tope admisible para un regalo? El que diga el sentido común. No será tan difícil decidirlo. Cuentan que cuando supo que Felipe de Borbón iba en serio con Letizia Ortiz, don Juan Carlos, Rey de España, se quejó a un íntimo: “Este niño va a cargarse la Monarquía”. Menos de medio año después va a tener que admitir que el niño lo que ha hecho ha sido asentar la Monarquía. Por lo menos ha puesto bastante de su parte para hacerlo. Otra parte ya no depende de él.

Su propio afán ENRIQUE GARCÍA MÁIQUEZ

ESCRIVÁ DE BALAGUER OR mucho que algunos lectores se esperasen de mí, antes o después, este título, bastantes habrán dado un respingo. En realidad, no cumplo sino con mi obligación periodística y doy cuenta de la más estricta actualidad provincial. Ayer, en Jerez de la Frontera, se puso a una rotonda el nombre de “San Josemaría Escrivá de Balaguer”. Es la que está junto a Pozoalbero, la casa de ejercicios espirituales que el Opus Dei tiene a la salida hacia Sevilla, y que atiende a todo Cádiz y más allá. Usamos el callejero para destacar la excelencia, ya sea en lo histórico, en lo deportivo, en lo político, en lo asistencial, en lo intelectual, en lo artístico, etc. Excluir la santidad no tendría sentido, dejando aparte el hecho de que en concreto, a un santo, una glorieta le viene como anillo al dedo. San Josemaría, bromas aparte, es una figura de importancia universal que vino en varias ocasiones a Jerez, a Pozoalbero. De una de esas visitas, Pemán dejó testimonio en un artículo memorable del Séneca. Allí se explicaba que la labor del Opus Dei venía de Dios, como su nombre indica, y que su fundador no era sino una causa segunda. A lo que replicaba el Séneca: “Pues esta causa segunda le ha salido a Dios de pri-

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San Josemaría es una figura de importancia universal que en varias ocasiones vino a Jerez

otro fardo de hachís. Y ya no se sabe lo que puede pasar, yo lo advierto, porque el oleaje trae la mercancía como si fueran las algas que tanto por saco dan en verano. Así que cualquiera de esos que juran y perjuran que se bañan hasta en los días más fríos del invierno, como si fueran el mismísimo Fermín Salvochea, se pueden enredar con estas finas hierbas sin venir a cuento. Eso si no chocan con algún busquimano desnortado. Los tiempos han cambiado una barbaridad. Cuando aparecieron los duros antiguos en la playa, allá por 1904, el gaditano y la gaditana se lanzaron, en plan busquimano de duros. Consta que tuvo que intervenir la Policía, pero no para detenerlos, sino para que dejaran trabajar en la antigua almadraba donde aparecieron. En aquellos tiempos se entendía que lo que se pierde es de quien lo encuentra. Y si tu suegra encontraba un duro, o tu tía 50 duros, eran suyos. No es como ahora, que cuando se encuentra el hachís se considera que es del Estado. El busquimano playero ha existido en Cádiz desde el tiempo de los fenicios. Algún erudito incluso escribió que a Cádiz la riqueza siempre le ha venido del mar. Y nuestros mares son caprichosos e imprevisibles.

mera”. Al honrarle ahora, el Ayuntamiento de Jerez es otra causa segunda: atiende a una iniciativa ciudadana muy amplia, que reúne al obispo, la Academia de San Dionisio, clubs deportivos, asociaciones de vecinos, hermandades y cofradías, comerciantes, empresarios particulares, etc. La corporación ha demostrado sensibilidad social, que no es exactamente lo mismo (incluso, a veces, es todo lo contrario) que la búsqueda de la popularidad o del aplauso unánime. Escrivá de Balaguer inspiró e impulsó Pozoalbero, por donde han pasado miles y miles de personas, ahondando en su fe y afinando su conciencia. Todos los que hemos visitado la casa alguna vez guardamos una viva memoria como mínimo sentimental. Pozoalbero ejerce una labor callada, pero fecunda, como un pozo. Desde la intrahistoria, ha dejado su huella en muchísimas vidas y, a través de ellas, en Jerez, en la provincia, en Andalucía… Una casa de retiros espirituales es un lugar de silencio que da frutos íntimos, así que es lógico que nunca haya montado jaleo mediático; pero es oportuno y hasta imprescindible que de vez en cuando se reconozca también públicamente lo que va por dentro. La rotonda, pues, ha quedado redonda.