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SEGURIDAD

| Miércoles 16 de abril de 2014

SEGURIDAD Edición de hoy a cargo de Luis Moreiro | www.lanacion.com/seguridad

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En Rosario, 10 muertos en 6 días a pesar de la Gendarmería Derrumbes. Ayer comenzaron a tirar

abajo los primeros de una serie de 67 puestos en los que se vendía droga

Viene de tapa

Ante este escenario de creciente violencia, ayer se puso en marcha una estrategia de alto impacto, que consistió en la demolición de los búnkeres allanados. El Ministerio de Seguridad provincial ordenó que fueran derrumbados tres quioscos de droga que fueron “intervenidos” el miércoles pasado en medio del megaoperativo de las fuerzas federales, que dejó 25 detenidos. Las paredes quedaron convertidas en escombros, pero nadie resultó preso ni tampoco se incautó de droga. Eran lugares que estaban vacíos y el objetivo, según explicaron en el gobierno provincial, es evitar que se vuelvan a vender estupefacientes. Hoy está previsto que se tiren abajo otros cinco puestos de venta de drogas. Desde 2012 fueron derrumbados con topadoras 37 búnkeres. A pesar que algunos fueron demolidos tres veces, fueron reconstruidos y actualmente siguen en pie. Quiosco reacondicionado Ayer, poco después de las 10, funcionarios de la cartera de Seguridad llegaron a 27 de Febrero al 7500, donde funcionaba hasta hace pocos días en lo que era una casa de familia. El lugar había sido reacondicionado, con paredes reforzadas, para ser una boca de expendio de droga. Custodiados por efectivos de la Gendarmería Nacional y de la policía provincial, operarios del gobierno provincial demolieron el lugar con martillos neumáticos. Los vecinos del búnker miraban en silencio la escena, que se repetirá durante los próximos días en los 67 puestos de venta de droga que fueron allanados durante el megaoperativo del miércoles pasado. Entre los funcionarios del área de Seguridad, calculan que habría por lo menos un centenar más en la

ciudad, pero ese número es el que está judicializado. El subsecretario de Seguridad Comunitaria, Osvaldo Laffatigue, advirtió que se estudia usar algunos de esos espacios para llevar adelante “tareas sociales”. Las autoridades provinciales y nacionales sólo pueden “intervenir” en quioscos de droga que están asentados en tierras fiscales. Según confiaron fuentes del gobierno provincial, se iniciaron tratativas con los fiscales federales para que se busque algún recurso legal para poder derrumbar también los búnkeres que están edificados sobre terrenos privados. Las otras dos bocas de expendio de drogas que fueron demolidas están situadas en Perú al 3300 y en Uruguay al 8200. El primero era un búnker “histórico” del barrio La Lagunita que, según fuentes policiales, era manejado por Luis Medina, el empresario que fue asesinado junto con su novia el 29 de diciembre pasado. En el otro quiosco de cocaína, los empleados provinciales completaron la tarea que habían iniciado los vecinos el viernes pasado, cuando decidieron por sus propios medios demoler el búnker, que había vuelto a funcionar unas horas después de ser allanado por los hombres de la Gendarmería. Fue muy tensa la situación que se vivió en ese barrio de la zona sudoeste, porque varios vecinos fueron amenazados de muerte por los jóvenes que trabajan como soldados para los narcos que explotan esos puestos de venta de droga. “La idea es que los lugares que son derrumbados queden con una custodia para evitar que se reabran y que se generen situaciones complicadas con los vecinos de la zona”, sostuvo Ángel Ruani, secretario de Seguridad Comunitaria.ß

Operarios provinciales derrumban paredes de un búnker de droga en la zona oeste de Rosario

Otro round entre Binner y Berni ^b^b^ El secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, y el ex gobernador de Santa Fe Hermes Binner protagonizaron un duro cruce por el operativo con el que el Gobierno desembarcó en Rosario para combatir el narcotráfico. “El resultado no es muy alentador”, había dicho el diputado sobre el despliegue de gendarmes en Rosario. ^b^b^ Berni no tardó en responder. Calificó las declaraciones de Binner de “muy desafortunadas” y lo acusó de pertenecer “al grupo de los que opinan sin saber lo que está pasando”. ^b^b^ Binner volvió a la carga. “Movilizaron 3000 personas para secuestrar tres armas, 50.000 dosis y 20 detenidos. Es una realidad pobre en relación con la gravedad del problema”, descargó.

marcelo manera

Una epidemia de violencia callejera que aún no encuentra rápida cura el escenario Daniel Gallo LA NACION

L

a epidemia de violencia se mantiene en Rosario. Los asesinatos continúan por más que las tropas federales de seguridad hiciesen la semana pasada un ostensible desembarco. Queda a la vista que la enfermedad es más grave, que resiste la focalizada intervención policial. Esa imagen de contagio, de un agresivo virus que hizo metástasis en las barriadas rosarinas no es una construcción periodística, sino la gráfica definición del ministro de Seguridad santafecino, Raúl Lamberto. Rosario escenifica un drama social que empieza a exhibirse también en otros lugares. El narcomenudeo fue ignorado durante mucho tiempo. Incluso después de demostrarse la carga de muerte que atrae la venta minorista de drogas, muchos fiscales federales aún afirman que el objetivo deben ser los grandes grupos de traficantes. Los crímenes en las calles no aparecieron con esas bandas, sino con el clan narco local que

lucha por un terreno, por un mercado, que le da un arma a un niño. Hasta fin de 2013, la justicia federal de Rosario tenía abiertas 200 causas, encaradas sólo por un grupo de 30 gendarmes de investigación antidrogas. Los búnkeres aumentaron. Sumaron 400 al menos, según un trabajo de la Universidad Nacional de Rosario. Esas edificaciones, casi fortificadas, quedaron señaladas hace poco en un informe anual de la fiscalía federal que advirtió sobre el uso de menores como vendedores o vigilantes. Ayer se derrumbaron uno o dos. La táctica de destruir los puestos de venta de drogas se usa también en el conurbano. Por ahora los narcos no decodificaron el mensaje. Ni en Rosario ni en Buenos Aires. En los primeros pasos de la llamada recuperación de los barrios rosarinos el resultado más concreto fue incrementar la confianza de los vecinos. No es ése un dato menor, pero al estar apuntalado por una sensación de esperanza de cambio deberá consolidarse con una visible modificación de la realidad. Y en ese sentido poco ayuda sacar de las calles sólo un puñado de armas des-

pués de un megaoperativo. Algunos miles de dosis de cocaína –apenas la venta de un día en los búnkeres– y menos de 30 detenidos en ese Día D necesitarán ser sostenidos por mejores resultados antes de perderse de nuevo la confianza pública. Hay que tomar en cuenta que cuando los gendarmes y su aparato logístico llegan a un lugar siempre causan impacto. Sin embargo, ese efecto se diluye en el tiempo. Aquellos que supieron desde adentro sobre las operaciones en el conurbano alcanzaron un mal diagnóstico de la prolongada experiencia bonaerense: el uniforme verde de los gendarmes dejó de imponer respeto y los hombres pasaron a ser vistos en los barrios como un policía más. Mataron al cuco por usarlo demasiado. En Rosario las motocicletas con dos niños asesinos a bordo no fueron paralizadas por el temor a las fuerzas federales. Rosario terminó 2013 con 900 heridos de bala y una tasa de homicidios de 22 cada 100.000 habitantes. Similar a la de Río de Janeiro, pero allá bajó en cinco años desde 49,9 y en Santa Fe los crímenes aumentan.ß

Conmoción en Saladillo por el hallazgo de una maestra jardinera asesinada a golpes

Matan a un menor ladrón y queman un patrullero

investigación. Por el hecho quedó demorado e incomunicado el marido de la víctima

bernal. Comenzó como una persecución y tiroteo entre tres delincuentes que escaparon de un control policial en la localidad de villa Obrera y terminó en una emboscada en Bernal, donde los vecinos de un ladrón muerto por la policía intentaron apropiarse del cadáver del malviviente, quemaron un móvil policial e hirieron de gravedad a un efectivo del Grupo de Apoyo Departamental (GAD). Ayer, la comisaría 7a. de Bernal tuvo que ser rodeada por los efectivos del mencionado grupo especial de la bonaerense. Se temía que habitantes del barrio IAPI intentaran coparla para rescatar a uno de los ladrones que participaron de la persecución y tiroteo en el que murió un joven delincuente, de 16 años, conocido como el “Ojón”. El violento episodio comenzó anteanoche, cuando dos policías a

bordo de un móvil de la comisaría 8a. de Lanús que transitaba por el barrio villa Obrera dieron la voz de alto a los ocupantes de un volkswagen Gol para identificarlos, pero el rodado no se detuvo. Así se inició una persecución de seis kilómetros que finalizó en Quilmes. Al llegar al barrio IAPI, en la intersección de Neuquén y 163, los sospechosos descendieron del rodado para refugiarse en el asentamiento. Allí se produjo un enfrentamiento en el que hubo un muerto y al menos 40 disparos. Cuando los policías se disponían a preservar el lugar, un grupo de 50 personas con palos y botellas comenzó a atacar a los efectivos. También incendiaron un móvil policial y el Gol. Después, llegó un grupo de policías en apoyo, que fue recibido a balazos por tiradores apostados en los techos de las viviendas.ß

monte chingolo

villa ballester

Sol Amaya

ENvIADA ESPECIAL

SALADILLO.– Marisol Oyhanart tenía 38 años y anteayer, a la hora de la siesta, como lo hacía habitualmente, fue a caminar. Pero nunca regresó. Ayer, después de un rastrillaje por una zona de chacras, detrás de una pista de ciclismo, fue hallado su cadáver. El cuerpo estaba boca arriba y presentaba golpes en la cabeza y el rostro. Por el hecho, el marido de la víctima, Sergio Rachit, quedó demorado e incomunicado. Los vecinos de esta tranquila ciudad aún no salen de su asombro. La víctima era una maestra jardinera, pero que no ejercía la docencia porque trabajaba junto con su marido en la distribuidora de gaseosas familiar. Anoche la fiscal a cargo de la investigación, Patricia Hortel, hizo un allanamiento en la casa de la víctima, situada en Saavedra al 3000, donde personal de la Policía Científica trabajó en busca de alguna pista que ayude a esclarecer el hecho. Los peritos revisaron el interior de la casa y también una camioneta Chevrolet Montana blanca propiedad de la familia. La fiscal dispuso el procedimiento luego de que el marido de la víctima declaró durante varias horas en la comisaría local y surgieron algunas dudas en cuanto a su relato, dijeron fuentes de la investigación. El cadáver fue hallado a las 7. Uno de los hermanos de la víctima, Delmar, participó del rastrillaje. “Ape-

Anoche hubo peritajes en la casa de Oyhanart nas vi las piernas, la reconocí”, dijo el hombre entre sollozos. El cuerpo estaba vestido con la misma ropa con la que Oyhanart había salido a caminar. Cerca de la escena del hallazgo los investigadores encontraron los auriculares y los lentes de la víctima, pero no su teléfono celular. “Todavía no se saben los motivos que causaron la muerte. Pero sí podemos decir que sufrió golpes en el rostro y en la cabeza”, dijo una fuente de la investigación. Los detectives del caso esperaban anoche los resultados de la autopsia. Rachit sostuvo que anteayer se fue a dormir la siesta y Marisol salió a caminar, como lo hacía habi-

g. aizaga/enviada especial

tualmente. Afirmó que se despertó porque su hija mayor lo llamó por teléfono para contarle que su madre no la había ido a buscar al colegio. Anoche continuaban declarando familiares de la víctima y de Rachit. Los hermanos Oyhanart sostuvieron que Marisol se llevaba bien con su esposo. Ya habían cumplido 15 años de casados. También declararon como testigos dos mujeres que se cruzaron con Oyhanart cuando caminaba, anteayer a las 15. Contaron que en ese momento “escuchaba música en su celular” y las saludó. La víctima y toda su familia son de Del Carril, un pueblo cercano a

Saladillo, de 2000 habitantes. La denuncia por la desaparición de Marisol fue hecha por su marido y sus hermanos anteayer, a las 19. La víctima era madre de tres hijos y tenía cuatro hermanos, dos de los cuales trabajan en la Municipalidad de Saladillo. Delmar Oyhanart contó que últimamente tanto él como una hermana suya notaban a Marisol “muy nerviosa”. Añadió que su hermana era sana y se cuidaba mucho físicamente, por lo que salía diariamente a trotar o a caminar por la zona donde ahora fue hallada asesinada. “Hacía esa rutina y después iba a buscar a los chicos al colegio. Tiene una nena de 15 años, otra de nueve o diez años y uno de cuatro”, detalló el hombre, quien dijo desconocer cómo era la relación entre su hermana y Rachit. “En Saladillo este tipo de episodios no pasan, lo que menos imaginábamos es que iba a pasar esto”, expresó Delmar. El secretario de Gobierno local, Mario Buezas, afirmó a la agencia de noticias Télam: “Todavía no sabemos qué características tiene este hecho, pero el último homicidio [que hubo en la ciudad de Saladillo] fue en 2011. Anoche se hizo un minucioso relevamiento de cámaras. Nosotros contamos con un centro de monitoreo”, aseguró el funcionario. Hoy la fiscal Hortel tendrá los resultados preliminares de la autopsia para conocer los detalles de cómo mataron a la víctima.ß

Lo mataron mientras esperaba el colectivo

Asesinaron a golpes al dueño de un bar

Un hombre de 31 años fue asesinado de un balazo delante de su novia cuando se resistió a un robo en una parada de colectivos de Monte Chingolo. Según fuentes policiales, el violento episodio ocurrió en el cruce de Cavia y Eva Perón, cuando la víctima, que habría sido identificada como Juan Carlos Muñoz, esperaba el colectivo. Anoche, la policía apresó a un sospechoso del homicidio, de 21 años, que había salido un mes antes del penal de Olmos.ß

El dueño de un bar fue hallado asesinado en el interior de su local, de villa Ballester. El sangriento hecho fue descubierto en el comercio situado en Federico Lacroze al 5000, esquina General Paz, a pocas cuadras de la peatonal de dicha localidad propiedad de la víctima. El dueño del local, que habría sido identificado por fuentes policiales como Luis Julio Boemo, de 63 años, fue asesinado a golpes y se desconocían los motivos del homicidio.ß