Conquistar el caos en el cuarto de lavado Myrrha Yglesias Pocas son

Pocas son las personas que disfrutan de lavar la ropa, sin embargo se tiene que hacer. Para realizar con gusto esta acti
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Conquistar el caos en el cuarto de lavado Myrrha Yglesias

Pocas son las personas que disfrutan de lavar la ropa, sin embargo se tiene que hacer. Para realizar con gusto esta actividad podrías realizar algunos cambios en tu cuarto de lavado que propiciarán que te sientas mejor.

Una de las habitaciones más utilizadas de la casa pero que frecuentemente se pasa por alto es el cuarto de lavado. Un espacio amplio siempre es deseable pero no siempre es posible. Si el cuarto es pequeño te recomendamos poner gabinetes, estantes o repisas en la parte alta donde se ubica la lavadora, ahí podrás guardar la plancha, el detergente, el cloro, el quita manchas y el suavizante de telas, entre otros productos de lavandería. Si quieres darle vida al lugar podrías lograrlo con unas macetas con las plantas que más te agraden ubicándolas sobre las repisas. Tener un radio podría amenizar y hacer divertida la actividad de lavado de tu ropa mientras escuchas música. Si los platos de tu mascota, sus juguetes y la cama están empezando a ocupar el cuarto de lavado, es momento de que recuperes el control, ubícalos en una esquina. Frecuentemente esta habitación se convierte en una especie de bodega donde van a parar todas aquellas cosas que no utilizamos. Esto hay que evitarlo para que puedas lograr que el espacio sea eficiente y pueda estar organizado. Coloca una canasta en la parte superior de la lavadora para los artículos encontrados en los bolsillos cuando hagas una revisión final antes de poner la ropa a lavar. Para evitar el síndrome del calcetín extraviado y para que sea más fácil la distribución de los mismos a sus propietarios, dale a cada uno una bolsa de malla para sus calcetines sucios. Hay que vaciar la trampa de la pelusa de la secadora con frecuencia. Esto ayuda a mantenerla limpia y funcionando correctamente. Lava el piso del cuarto de lavado al menos una vez por semana. Puesto que es difícil de mover la lavadora y secadora, invierte en un plumero plano y largo para llegar por debajo de ellos. Para las prendas que no se pueden meter en la secadora, coloca una barra en la parte superior o un mecate. Asegúrate de que haya espacio disponible en el cuarto para planchar, para lo cual una buena iluminación es indispensable. Tal vez una tabla plegable adjunta a la puerta sea una buena alternativa. Si tienes espacio, dedica un cesto de ropa para cada miembro de tu familia, puedes colocarles etiquetas con sus nombres. Cuando la ropa esté doblada cada uno puede recogerla, en lugar de que tengas que ir a cada cuarto para dejarla.

Sugerencias          

Comprueba el suministro de productos de lavandería, compra estos repuestos antes de que se agoten Enséñale a todos en tu casa (a partir de los diez años) la forma de lavar la ropa Si la lavadora y secadora tienen más de diez años, considera reemplazarlas Mantén un cubo de basura pequeño, puede ser útil para el vaciado de la pelusa de la secadora Trata de lavar al menos una carga de ropa al día. Es importante separar la ropa por color No te olvides de guardar los productos de limpieza fuera del alcance de los niños Todos los elementos que no pertenecen al cuarto de lavado te recomendamos trasladarlos a otro lugar Si debes tener una caja de herramientas u objetos en este espacio, asegúrate de que estén organizados Procura que el cuarto esté bien ventilado Desconecta los aparatos eléctricos cuando no los utilices para ahorrar energía

Te recomendamos pintar las paredes del cuarto con colores claros para agregarle mayor luminosidad al espacio y un efecto de amplitud. Unos cuadros o unas fotografías podrían cambiar el aspecto del espacio. Quizá también te gustaría cubrir la lavadora y la secadora con una tela que te guste. Un piso antideslizante es muy recomendable. No importa que tan pequeño sea tu cuarto de lavado, lo puedes organizar para hacer esta tarea lo más eficientemente posible y tener así más tiempo para lo que te gusta.